La División de Asuntos internos de la policía no ha logrado dar con la ubicación del subcomisario Martín Ñancucheo, para notificarle de su desafectación de la fuerza, por presuntamente integrar la banda de robacables de la que murieron cuatro miembros electrocutados la noche del lunes.
Las autoridades intentan dar con él para retirarle el arma de reglamento y la placa, pero desapareció de los lugares que solía frecuentar. En paralelo la investigación para determinar su conexión con los fallecidos sigue su curso.
Ñancucheo intentó anoche “recuperar” un handy policial que utilizaban los delincuentes de la camioneta que dejó abandonada Ángel Gallardo frente al Hospital Municipal con los cuerpos calcinados de cuatro personas.
Gallardo fue detenido horas después y uno de los integrantes de la banda sobrevivió y se encuentra recuperándose en el centro médico local.
Los handies que usa actualmente la policía están encriptados y su asignación es personalizada, de los esfuerzos de Ñancucheo de recobrar el suyo en medio de la confusión y el movimiento que se generó la noche con la camioneta abandonada en el Municipal. Además, nunca lo denunció como robado.
Fuente La Brújula 24