Unas 22.100 hectáreas quedaron arrasadas por el fuego.
Apoco más de un mes de haberse reactivado la actividad turística en el Parque Nacional Lanín, las autoridades provinciales anunciaron que el incendio, que comenzó a fines de enero de este año, se encuentra oficialmente extinguido.
El anuncio fue comunicado por el Comando Unificado del Parque Nacional Lanín y el Gobierno de la Provincia de Neuquén, en el que destacaron los intensos trabajos para combatir el fuego.
El desastre fue de tal magnitud que un total de 22.100 hectáreas quedaron arrasadas, siendo Valle Magdalena una de las zonas más afectadas. Los operativos para combatir las llamas contaron con la participación de más de 1000 personas, de los cuales 282 eran brigadistas, y 17 medios aéreos, entre ellos 12 helicópteros, 3 aviones hidrantes, un Boeing y un Airbus Helicopter, con capacidad para transportar una importante cantidad de agua. A su vez, las condiciones climáticas, que se registraron en las últimas semanas de marzo y durante el mes de abril, fueron fundamentales para la disminución de la peligrosidad del incendio.
Según los registros informados por el portal El Cordillerano, el Índice de Peligrosidad de Incendios (FWI) descendió al rango de moderado a bajo, impulsado por una significativa precipitación acumulada de 111,47 mm en la estación meteorológica de Tromen. Esto contribuyó a reducir la disponibilidad de combustibles para la ignición.
Además, las recorridas aéreas y terrestres realizadas por el personal técnico, que incluyeron el uso de drones con cámara térmica y helicópteros, no detectaron nuevas columnas de humo en los sectores de mayor carga de combustible, lo que corroboró la extinción del fuego en los puntos más críticos.
En cuanto a la superficie afectada, se realizó una actualización de los datos a través del uso del Sistema de Información Geográfica (GIS), que permitió ajustar el cálculo de la superficie quemada. De las 22.100 hectáreas inicialmente afectadas, 19.380 hectáreas fueron totalmente destruidas, mientras que el resto correspondió a áreas que sufrieron daños parciales o que no fueron alcanzadas por las llamas.
Ahora, el Parque Nacional Lanín inicia una nueva fase: el análisis de severidad del incendio para determinar el impacto real sobre el ecosistema y planificar las acciones necesarias para la restauración de los bosques afectados.
Por último, la Administración de Parques Nacionales agradeció —en el Parte 65 emitido este miércoles— a quienes integraron el operativo en este incendio, “destacando el compromiso, la vocación de servicio y el esfuerzo, reconociendo la importancia de una respuesta articulada ante eventos de esta magnitud”.
A mediados de marzo y tras haber contenido el fuego en el Valle Magdalena, se habían habilitado las actividades en la zona. La reapertura fue un respiro tanto para las autoridades como para los operadores turísticos, quienes ya se alistaban para recibir a los visitantes en una de las regiones montañosas más destacadas del país.
En simultáneo, el camping Tromen comenzó a funcionar con normalidad, lo que alivió a aquellos que habían visto reducidas sus opciones de recreación en la zona. A su vez, los recorridos en el área del volcán se habilitaron pero con una serie de reglas estrictas para asegurar tanto la seguridad de los visitantes como la protección del entorno natural.
Quienes deseen subir al Volcán Lanín deberán cumplir con varios requisitos, entre ellos el registro previo en la página web del parque y la presentación de una declaración jurada en el Centro de Informes de Río Turbio en el horario de 8:00 a 14:00, tal como indicó el portal LM Neuquén.
Asimismo, las actividades en la zona estarán restringidas a un horario comprendido entre las 8:00 y las 20:00 horas, con el fin de permitir a los turistas disfrutar de la belleza del volcán de manera segura y organizada.
Fuente: diario Infobae