Qué desangelado se nos ha vuelto el día!
Horacio partió hoy, se fue en la madrugada fría y gris. Su mirada iluminada por la firmeza de sus ideales y por la generosidad de su sentir solidario.
Nada era imposible para él porque nada es imposible para los que luchan.
Compartió con nosotros el pan, el vino y la fuerza de la militancia por el país y el mundo que soñamos.
No hay ausencia camarada compañero. Estás aquí, en la memoria de nuestros corazones para siempre.
Nuestro abrazo cargado de ternura para su esposa Ana María y sus pequeñas Agostina Chiara y Rocío Daniela
FRENTE POPULAR “25 DE FEBRERO”