Otro asalto en un campo de la región, pone en alerta a productores y peones. En esta oportunidad el hecho ocurrido en horas de la madrugada de ayer, fué en un campo ubicado en Fra-Pal, denominado Cerro del Tigre, a 30 kms de Sierra de la Ventana.
El establecimiento «Cerro del Tigre» se ubica a mil metros de la rotonda, cruce de las rutas 51 y 72 y su actividad es la de cría de ganado bovino y especies exóticas para caza mayor, siendo receptivo de turismo rural.
A los que se vienen registrando desde noviembre del año pasado a la fecha en toda la zona del Sudoeste Bonaerense, se le sumó otro caso acontecido en un establecimiento rural ubicado en Fra-Pal. En la ocasión, los malvivientes golpearon a un matrimonio y se llevaron dinero y el auto de la pareja, el cual apareció horas después abandonado en Tres Arroyos. Continúan teniendo lugar asaltos en diferentes establecimientos rurales de Coronel Pringles y de la región, los cuales no han cesado desde
que comenzaron allá por el mes de noviembre del año pasado. En estos casos, los delincuentes, ingresan a los campos para robar y después dirigirse a través de los mismos a otros vecinos y continuar con la sustracción de diferentes elementos de valor. Hasta el momento en los últimos cuatro meses al menos tuvieron lugar unos seis hechos delictivos de este estilo, al que se le suma el último ocurrido en horas de la madrugada de ayer en un campo ubicado en Fra-Pal, denominado Cerro del Tigre. Allí los malvivientes sorprendieron al matrimonio que reside en el lugar, constituido por José Martínez y Marta Bilbao, cuando los mismos regresaban en horas de la madrugada. Acto seguido sucedió lo que acontece en todos estos casos, donde golpean a las personas y las amordazan para reducirlas y exigirles, lo único que buscan, que generalmente se trata de dinero en efectivo. Fue así que en este caso lograron alzarse con dinero, pero para ello golpearon a ambas personas. Finalmente y como lo hacen también en la mayoría de estos casos, los delincuentes
que llegan al campo caminando o son dejados en su ingreso por algún rodado, huyeron en el automóvil del matrimonio, un Fiat Siena, el cual en horas de la mañana apareció abandonado en Tres Arroyos.
Los damnificados se encuentran bien aunque sin poder salir de su asombro por lo sucedido y ambos recibieron atención médica una vez que pudieron trasladarse del campo y pedir ayuda como podían, ya que seguían maniatados, aunque podían caminar.