«Lo que vine a buscar es una solución definitiva. Porque lo que dicen en los medios es que el coronavirus va a seguir estando aún existiendo la vacuna, pero yo no sé si voy a estar o ninguno de los otros comerciantes. Estamos buscando una respuesta para la economía de todos. Yo tenía 8 empleados y ahora tengo 4» comenzó hablando Máximo refiriéndose a la reunión que organizaron los comerciantes y prestadores de servicios con las autoridades en Sierra de la Ventana.
Le preguntamos a Máximo si, en caso de una reapertura de los restaurantes, sería posible para él afrontar los gastos que le demanda abrir sus puertas pero con menos clientes que de costumbre, a lo que nos respondió: «En realidad nadie lo sabe. Antes tenía entre 90 y 100 comensales en una noche, pero ahora podría trabajar sólo con 60 personas por noche. Además, no tendrían el tiempo de comer postre y demás por lo tanto la recaudación sería menor. Y habría que ver si la gente en realidad está dispuesta a exponerse y salir a cenar para que la concurrencia se mantenga todos los días».
Máximo asegura que el porcentaje de clientes que recibe en su restaurante residiendo en el AMBA supera el 30%. «Mucha de esa gente tiene campo o casas acá y me visitan constantemente. Con la gente local no sé si el restaurante sería rentable. La gente de Bahía Blanca comprende el mayor porcentaje de mis clientes y si ellos no pueden venir, sería muy incierto que el restaurante pueda seguir funcionando». Máximo cree que todo esto sumado a la cantidad de gastos e insumos que tiene que cubrir y a la reducción de empleados que debería tener, el negocio no sería rentable.
Con respecto a las soluciones que pudo encontrar entre tantas incertidumbres, Máximo nos contó que pudieron conseguir que la mitad del sueldo de los empleados es remunerado por el gobierno. «Tomamos la decisión de entregarles a nuestros empleados un bono para comprar mercadería en los supermercados. Eso más la plata que reciben del estado sería aproximadamente la mitad de lo que recibían antes. No sé cómo harán para pagar alquileres y demás me preocupa pero no es algo que yo pueda solucionar. No veo que la clase política esté haciendo el mismo esfuerzo que nosotros para que la gente no pase necesidad» sentenció.
Al conversar sobre la idea de que nuestro distrito sería uno de los destinos más buscados para visitar cuando sucedan la apertura de actividades, Máximo nos compartió su punto de vista: «Creo que se tiene que abrir de verdad, con protocolos y demás por si alguien puede llegar a aparecer alguien con síntomas, por ejemplo. Tenemos la posibilidad de que Sierra sea un destino bien concurrido. Pero hasta que no permitan que la gente transite, no vamos a poder sacarle el provecho y lo que estamos perdiendo hoy no lo vamos a recuperar»
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