Las reservas naturales de la provincia de Buenos Aires, que ofrecen espacios amplios y servicios seguros, son una opción ideal para la actividad turística tras la pandemia y por ese motivo ya están mejorando su infraestructura para recibir visitantes, informó hoy la Subsecretaría de Turismo bonaerense.
El territorio bonaerense ofrece una gran variedad de ecosistemas que se corresponden a sus diferentes regiones, con áreas protegidas que conservan su estado natural.
La reserva natural municipal Faro Querandí, ubicada a 5 kilómetros de Mar Azul y que tiene una superficie de más de 5.700 hectáreas y una franja de 21 kilómetros de dunas con un ancho variable de 3 kilómetros, es una de las más importantes por la amplitud de sus playas.
Este ecosistema costero cuenta con aves, serpientes, zorros grises, gatos monteses, ñandúes y más de cien tipos de plantas, muchas de las cuales poseen propiedades medicinales.
El guardaparques Abel Escobar señaló que «la gente se sorprende de la biodiversidad cuando recorren los senderos ecoturísticos».
La reserva natural Laguna de los Padres, ubicada a 10 kilómetros de Mar del Plata, tiene una gran afluencia de público y por ese motivo sus 687 hectáreas fueron divididas en tres zonas que son de uso intensivo, de conservación (solo se puede recorrer a pie) e intangible (con acceso vedado al público).
La reserva constituye una zona de una «altísima biodiversidad» en la que se registraron más de novecientas especies de aves que con la merma del movimiento de personas se hicieron más visibles.
El parque provincial Ernesto Tornquist, ubicado en el sudoeste de la provincia, en la zona central de la Serranía de Ventania y con más de seiscientas especies de árboles, reptiles, aves migratorias, anfibios, pumas y ciervos, es otra de las reservas naturales bonaerenses.
La reserva funciona como acceso al ascenso al cerro Ventana y también a senderos con distintos grados de dificultad.
El lago Epecuén, en la zona centro-oeste y que esta semana ofreció un espectáculos singular al aparecer con una cobertura blanca por la sanilización de sus aguas, es otra alternativa natural que ofrece la provincia de Buenos Aires para los turistas que quieran disfrutar de la naturaleza tras la pandemia de coronavirus.(telam)