El Reino Unido no volverá a la normalidad antes de la Navidad y el coronavirus perdurará durante décadas, incluso si se encuentra una vacuna efectiva, advirtieron hoy científicos que asesoran al gobierno británico.
Mientras tanto, el mundo ya rondaba los 15 millones de contagios y el virus siguió haciendo estragos sobre todo en Estados Unidos y Brasil, donde el presidente Jair Bolsonaro volvió a dar positivo y lleva más de dos semanas infectado.
«Esta infección no va a desaparecer; ahora es una infección endémica humana; incluso si tenemos una vacuna o tratamientos muy buenos, la humanidad seguirá viviendo con este virus durante muchos, muchos años», afirmó Jeremy Farrar, miembro del Grupo de Asesoramiento Científico del gobierno británico, ante el Parlamento.
El virus «estará aquí para siempre, no se va a ninguna parte y habrá inviernos en los que el coronavirus estará de vuelta; creo que la idea de que lo vamos a eliminar en toda la población no es realista», agregó John Bell, docente de la Universidad de Oxford.
Las advertencias de los científicos británicos se produjeron en momentos en que el mundo rondaba los 15 millones de casos confirmados de coronavirus, con 14.765.256 según el balance diario de la Organización Mundial de la Salud (OMS) o 15.023.398, según reportaba esta tarde la base de datos en línea de la universidad estadounidense Johns Hopkins (JHU, en inglés).
Además, la OMS computaba 612.054 muertes por la enfermedad desde el comienzo de la pandemia y la JHU, 618.061.
En Estados Unidos -por lejos el país más afectado, con más de 26% de los casos y de 23% de los decesos en todo el mundo-, California, su estado más poblado, se convirtió hoy en el nuevo epicentro del virus al superar en cantidad de contagios a Nueva York, con cerca de 410.000.
Desde hace dos meses y medio, Estados Unidos vive un repunte de casos de Covid-19, principalmente en los estados del sur y el oeste del país, que creció tanto a partir de las reaperturas, que la curva actual ya superó el pico nacional alcanzado en el peor momento de Nueva York en abril pasado.
Asimismo, el balance de muertes (142.459, hasta esta tarde) superó con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia, a tal punto que el presidente Donald Trump admitió que la situación «empeorará antes de mejorar» y que se estaba «acostumbrando al barbijo», que comenzó a usar hace un par de semanas tras rechazarlo durante varios meses.
En Brasil -segundo país más castigado, con más de 14% de los casos y de 13% de las defunciones en todo el mundo-, Bolsonaro dio positivo a un tercer examen desde que el 7 de este mes se confirmara su contagio y continuaba aislado y «en buena evolución», según un comunicado oficial.
Allí, el Tribunal de Cuentas objetó al Ministerio de Salud -a cargo de Eduardo Pazuello, un general del Ejército sin experiencia en salud pública- por haber ejecutado apenas 29% del presupuesto para la gestión de la pandemia, calificada de «gripecita» en varias ocasiones por Bolsonaro.
En Rusia -cuarto país con más casos confirmados de coronavirus-, el primer ministro, Mijail Mishustin, dijo hoy ante el parlamento que «cuatro vacunas» contra la enfermedad, de las «más de 26» que están desarrollándose en el país, «han demostrado su seguridad» aunque aún continuaban en etapas de ensayo.
En tanto, los laboratorios Pfizer y BioNTech informaron que firmaron un contrato con el gobierno de Estados Unidos para proveerle hasta 600 millones de dosis de una futura vacuna contra el coronavirus por valor de 1.950 millones de dólares.
No obstante esos anuncios, la OMS advirtió que la población en general no empezará a ser vacunada antes de «la primera parte de 2021».
«Hay que ser realistas en cuanto a los tiempos; no importa cuánto intentemos acelerar el proceso, tenemos que estar seguros de que la vacuna es segura y efectiva, y eso toma su propio tiempo; estamos apurando las cosas todo lo que se puede, pero no significa bajo ninguna circunstancia que vamos a tomar atajos en lo referido a la seguridad», señaló el director de Emergencias de la OMS, Mike Ryan.
Mientras tanto, en Perú -sexto país con más casos de coronavirus-, el gobierno central intervino por decreto la gestión de salud pública en el departamento sureño Arequipa, afectado en las últimas semanas por un brusco aumento de los contagios que generó descontrol y pánico, y fuertes cuestionamientos al gobernador regional, Elmer Cáceres.
En Bolivia, el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) informó que realizó el reconocimiento legal de 3.016 cadáveres de personas confirmadas o sospechosas de coronavirus (420 de ellos en los últimos cinco días) fuera de hospitales, lo que podría elevar sustantivamente la cantidad de muertos por Covid-19 computadas oficialmente en el país, de 2.273 hasta anoche.
Por otra parte, en España, uno de los países que reanudó actividades tras considerar superada la peor parte de la pandemia, el Ministerio de Sanidad reconoció hoy 224 brotes activos de coronavirus, 23 más que hace dos días, aunque aseguró que la mayoría de ellos estaba controlada.