La provincia de Buenos Aires sigue siendo uno de los lugares críticos en el mapa de contagios por covid en el país. Más allá de los reportes y proyecciones, distintos intendentes de la oposición –de Tandil, La Plata, Olavarría– desoyeron recientemente, de distintos modos, las disposiciones del ejecutivo provincial, con consecuencias que ya se materializaron en aumentos de casos. “Los intendentes saben los riesgos que corren desoyendo las recomendaciones, nosotros siempre apostamos al diálogo y a la razón”, indicaron en diálogo con Página/12 fuentes de la gobernación, descartando cualquier posibilidad de sanción al respecto. Según explicaron este lunes el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, y el ministro de Salud de la provincia, Daniel Gollan, el aumento de casos en los municipios del interior de la provincia alcanzó un 17 por ciento del total. La preocupación ya no es solo en el AMBA, cada vez hay menos municipios en la provincia dentro de la fase cinco. Solo 18 localidades se encuentran en esa instancia, mientras que 73 transitan la fase cuatro, y 44 la tres. Este domingo culmina el esquema de aislamiento obligatorio establecido para la provincia y las autoridades deberán decidir cómo continúa la cuarentena.
En los próximos días habrá reuniones entre funcionarios provinciales, expertos e intendentes para analizar cómo continúa la situación en el AMBA. “Estamos en un amesetamiento alto, pero por suerte está aplanado. Tanto el uso de camas, como de tiempo de duplicación», afirmaron. «Puede ser que haya algunas nuevas aperturas, pero con un compromiso importante de parte de los intendentes de hacerlo cumplir”, arriesgaron. Con respecto al diálogo con la Ciudad de Buenos Aires, tras el decreto de Nación que establece la redistribución de la coparticipación, esta vez en beneficio de la provincia, desde el gobierno bonaerense aseguraron que “no afectará en nada, el trabajo coordinado en materia sanitaria continuará del mismo modo”.
«Fomentar una situación anárquica, en la que cada uno hace lo que se le antoja, en medio de una pandemia tiene una única consecuencia: mayor cantidad de contagios y mayor cantidad de muertes», subrayó Bianco con respecto a los municipios que se negaron a respetar las disposiciones provinciales. Gollan, además, explicó que en el primer cordón del conurbano los casos de covid-19 son 1.650 cada 100 mil habitantes; en el segundo cordón llegan a 2.186; en el tercero ascienden a 2.491 y en la Ciudad de Buenos Aires, a 3.553. En cuanto al nivel de ocupación de camas de terapia intensiva, el ministro de Salud dijo que de las 6.258 con las que se cuenta en toda la provincia, el 52,6 por ciento se encuentran ocupadas, mientras que al considerar en particular el AMBA, las camas ocupadas son 3.041, con un 66,3 por ciento de ocupación.
Desobedientes
«El sistema de fases no es algo que se nos ocurrió a nosotros sino que lo trabajamos en conjunto, incluso algunos de los puntos del sistema de fase fueron propuestos por los intendentes de la oposición», recordó el jefe de Gabinete y expresó «preocupación por los intendentes que no están cumpliendo con las normas».
En Tandil, el intendente radical Miguel Angel Lunghi, la semana pasada decidió de forma unilateral abandonar el sistema de fases provinciales y crear su propio sustema de «semáforo». El resultado fue que el municipio duplicó los casos en la última semana, llegabdo a 227 casos el domingo. «Le pedimos nuevamente al intendente que cumpla con las normas. En la anarquía no gana nadie, pierden los tandilenses«, subrayó Bianco y agregó que «habrá que ver si decide respetar la normativa provincial y nacional. Nosotros vamos a seguir cuidando a los y las tandilenses».
En respuesta a Bianco, Lunghi remarcó que la medida “no fue para enfrentarse con provincia” y agregó que está “abierto al diálogo». El intendente sostuvo que “indudablemente cayó muy mal la posición que tomamos en Tandil”, y, para justificar su accionar, comparó la situación del municipio con la de Olavarría, ya que esta fue ubicada por el gobierno provincial en fase cuatro. Según Lunghi “Olavarría está igual que Tandil” que retrocedió a la etapa tres. «Tenemos realidades parecidas, pero estamos en distintas fases”, sacó cálculos.
Otro municipio conflictivo es la capital provincial conducida por Julio Garro (JpC). En La Plata –fase tres– decidieron abrir un autocine. Bianco aclaró que esa actividad está prohibida en esta fase y explicó que para permitirlo, deberían contar con un permiso bonaerense y nacional que no tienen. El jefe comunal compartió en sus redes sociales un gráfico que muestra que La Plata está anteúltima en comparación con los demás distritos del AMBA, en relación a los contagios cada 100 mil habitantes. En línea con lo que vienen sosteniendo varios representantes de la oposición, agregó que “es fundamental la responsabilidad individual para poder convivir con este virus hasta que llegue la vacuna”. El Ministerio de Salud bonaerense confirmó este lunes 81 nuevos contagios; en total suman 12.053 los casos confirmados.
Bahía Blanca, otra de las ciudades gobernadas por la oposición, según los médicos está al borde del colapso. El director del hospital Penna, Gabriel Peluffo, indicó que este lunes tuvieron que aislar a 55 trabajadores por contactos con gente contagiada fuera del hospital. “Los casos son crecientes y el número de camas disponibles baja día a día», alertó. En contraposición, el intendente Héctor Gay había asegurado que “no se puede hablar de un colapso en el sistema hospitalario” y que «la palabra ‘colapso’ está lejos de la realidad».
El intendente de San Pedro, Cecilio Salazar, que en mayo se alejó de JpC, tiene una postura diferente a las de sus pares. “Creemos que no debería haber más flexibilización. Con la fase cuatro estamos bien. Tenemos muchos casos, más de 600 y tenemos un total de 16 camas. En el interior de la provincia hay pocas camas», indicó en diálogo con Página/12. “En las últimas semanas el 50 por ciento de las muestras dan positivo”, aseguró. Y opinó que “pedir más flexibilización es una locura porque en los municipios es exponencial el aumento de casos”.
Las localidades con más aperturas
Según el nuevo reporte del Gobierno de la provincia de Buenos Aires cada vez hay menos municipios en fase cinco –la de mayor flexibilidad–. Tan solo 18 siguen en esa etapa, mientras que 66 están en la fase cuatro, y 44 en la tres. Las localidades en la etapa más avanzada, en la que se permiten reuniones de un máximo de 10 personas al aire libre, realizar entrenamiento y competencias de automovilismo son: Adolfo Alsina, Adolfo González Cháves, Coronel Dorrego, Coronel Suárez, Daireaux, Florentino Ameghino, General Guido, General Lamadrid, General Pinto y General Villegas. También figuran en la lista Lincoln, Monte Hermoso, Puán, Rauch, Saavedra, Tapalqué, Tordillo, y Tres Lomas.
En fase cuatro están los municipios que en las últimas dos semanas tuvieron más de diez nuevos casos cada cien mil habitantes. Algunos son: Azul, Bahía Blanca, Balcarce, Bolívar, Chascomús, Chivilcoy, Junín, Necochea, Olavarría, Carmen de Patagones, Pehuajó, Pergamino, Pilar, Pinamar, San Andrés de Giles, San Antonio de Areco, San Pedro, Trenque Lauquen, Tres Arroyos, Villa Gesell y Zárate. Mientras que en fase tres se encuentran: Bragado, Tandil, Avellaneda, Berazategui, Cañuelas, Ensenada, Esteban Echeverría, Ezeiza, Hurlingham, Ituzaingó, La Matanza, La Plata, Lanús, Lomas de Zamora, Luján, Moreno, Pilar, Quilmes, San Isidro, San Miguel, Tres de Febrero y Vicente López, entre otros.
Informe: Melisa Molina.
Foto: Emmanuel Briane-La Nueva