El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires dio a conocer, mediante un comunicado, que desde marzo los contagios se dispararon y aumentaron un 184% en ese período.
El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires informó este martes que, desde el inicio de las clases presenciales, en marzo pasado, se «quintuplicaron los casos de coronavirus» en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), en tanto que solo en la provincia los contagios aumentaron 184% en ese período.
En un comunicado, la cartera sanitaria precisó que «en un mes, se pasó de 1.911 a 9.828 casos diarios promedio por semana en el Área Metropolitana», y recordó que ante la escalada de casos, «países como Reino Unido, Portugal, Chile y Uruguay también interrumpieron la concurrencia a las aulas».
Por su parte, el titular de la cartera, Daniel Gollan, agregó por medio de su cuenta de Twitter que «los casos aumentaron un 184% en la Provincia desde mediados de marzo».
Los casos aumentaron un 184% en la Provincia desde mediados de marzo. Las clases presenciales no son un factor de contagios, porque los protocolos se respetan bien en las aulas. Pero todos los países del mundo demuestran que la circulación que generan influye en el crecimiento. pic.twitter.com/HTqLxSxNy6
— Daniel Gollan (@DrDanielGollan) April 20, 2021
Tal como había dicho hace diez días, cuando el presidente Alberto Fernández anunció las nuevas medidas de restricción, Gollan explicó este martes que «las clases presenciales no son un factor de contagios, porque los protocolos se respetan bien en las aulas. Pero todos los países del mundo demuestran que la circulación que generan influye en el crecimiento».
En el comunicado de este martes, Salud planteó que la decisión de suspender la presencialidad «va en la misma línea que difundió ayer el ministerio de Salud de la Nación y de las conclusiones de expertos y estudios científicos locales e internacionales».
De acuerdo a las cifras que difundió Gollan para respaldar esa decisión, la provincia aporta al AMBA tres millones de alumnos, a los que se agrega un número similar entre docentes y familiares, que generan una enorme circulación de personas.
La cartera sanitaria precisó que «del 1° al 7 de marzo de este año, cuando recién se iniciaban las clases presenciales en los niveles inicial y primaria, el AMBA registraba un promedio diario de 1.911 casos».
En este sentido, añadió que, «luego de tres semanas, ya con el nivel secundario también en la modalidad presencial, los casos diarios promedio por semana escalaron a 5.160».
«Finalmente, la semana pasada, entre el 12 y el 18 de abril (a un mes del inicio de clases en todos los niveles), los casos diarios se dispararon hasta llegar a 9.828 (promedio semanal) en los 40 municipios del Área Metropolitana que rodea la Ciudad de Buenos Aires», continuó.
Desde el Gobierno bonaerense se remarcó que «se quintuplicaron los casos» y se planteó que «los expertos coinciden en que resulta evidente que esta tendencia se relaciona, en gran medida, con el aumento de la circulación de personas».
También difundieron declaraciones del médico infectólogo Tomás Orduna, miembro del Comité de Expertos que asesora al Ministerio de Salud bonaerense y al Gobierno nacional, en las que afirmó que «tener abiertas dos semanas las escuelas en la ciudad de Buenos Aires no va a contribuir para el objetivo propuesto por el Presidente», que es reducir la cantidad de casos de coronavirus en los próximos 15 días.
Por otro lado, aclaró que la suspensión de clases presenciales es sólo una de una serie de medidas estratégicas tomadas frente a la «gran circulación comunitaria» del virus que registra hoy el AMBA.
Orduna remarcó que «esa suspensión se fijó con una fecha de inicio y finalización, lo que no parece grave en el contexto de esta pandemia de características inusitadas que atraviesa la humanidad».
Desde Salud insistieron en que «la influencia de este tipo de medidas sanitarias fue analizada y publicada por la revista científica especializada The Lancet en un estudio sobre 131 países en el que los científicos concluyeron que las Intervenciones No Farmacéuticas, incluido el cierre de escuelas, el cierre del lugar de trabajo, la prohibición de eventos públicos, la prohibición de reuniones de más de diez personas, los requisitos para quedarse en casa y los límites de movimiento interno, están asociados con una transmisión reducida del SARS-CoV-2».