El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, es quien en la previa aparece con más chances de quedarse con la conducción partidaria, mientras desde el sector minoritario encabezado por Martín Lousteau siguen dando batalla por posicionarse.
La Unión Cívica Radical deberá elegir este viernes a su nuevo titular en reemplazo del diputado Alfredo Cornejo, y si bien el gobernador de Jujuy Gerardo Morales aparece con mejores chances para alzarse con el puesto, desde el sector minoritario del partido, encabezado por el senador Martín Lousteau, siguen dando batalla por posicionarse y obtener lugares en la conducción.
La elección del titular del Comité Nacional de la UCR se realiza a través de delegados partidarios, quienes están convocados para el mediodía en la histórica sede del partido de la calle Alsina.
La representación se realiza a través de 4 delegados por provincia, lo que multiplicado por 24 (por las 23 provincias más la CABA) totaliza 96 personas, número al que se le suman los representantes de los trabajadores radicales, la juventud y la Franja Morada (rama universitaria), por lo que la cifra final será de 102.
Sin embargo, de ese número, sólo 94 delegados estarán en condiciones de ejercer su voto en el plenario, ya que deben restarse ocho delegados pertenecientes a dos distritos que están intervenidos: Tucumán y Santiago del Estero.
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, es quien en la previa aparece con más chances de quedarse con la conducción partidaria: el conteo de delegados le daría, según adelantan desde su sector, unos 61, muchos más que la mitad más uno de los necesarios para alzarse con el triunfo.
En el espacio de Morales afirman que Lousteau y los suyos tienen 25 delegados a favor, aunque desde la línea interna Evolución (que tiene en Lousteau a su principal figura aunque también la integran el diputado Emiliano Yacobitti y el dirigente Enrique «Coti» Nosiglia) confían en poder lograr hasta 42 voluntades.
Este viernes, siguieron las negociaciones para llegar al plenario con los mayores consensos posibles y tratar de moderar el clima de tensión que se instaló en el radicalismo en los últimos dos meses.
Este clima se fue caldeando a partir de la ruptura del bloque en Diputados (donde Evolución decidió formar una bancada aparte con 12 legisladores), con el fuerte contrapunto personal que protagonizaron Morales y Lousteau en la última reunión del Comité Nacional y con la elección de la nueva titular de la Juventud Radical.
Este último cargo, que recayó en la correntina Valeria Pavón, perteneciente a la corriente que lidera Morales, se definió en el medio de una elección muy tensa en la que que hubo golpes, empujones y agresiones entre los distintos sectores, con acusaciones de intervención de patotas vinculadas a clubes de fútbol.
La otra opción del sector de Lousteau es intentar judicializar la elección.
En el caso de apostar por la vía legal, desde Evolución denunciarían ante la Justicia irregularidades en los mandatos de delegados e invocarían los antecedentes de la intervención de algunos distritos como también la judicialización que se dio en la UCR bonaerense cuando se eligieron las autoridades partidarias de la jurisdicción.
En la definición del resultado será clave lo que voten los delegados de Mendoza, a quienes conduce el actual titular del partido y flamante senador por esa provincia, Alfredo Cornejo.
Un movimiento reciente del propio Cornejo -su postura ante la ruptura del bloque radical en Diputados, donde permaneció con el sector de la mayoría- indicaría que sus delegados votarían a Morales para encabezar el Comité Nacional.