Hay una mezcla de preocupación y resignación frente a la utilización de información personal que hacen los algoritmos y las soluciones de inteligencia artificial. En un año, los casos de delitos informáticos aumentaron un 70 por ciento en la Argentina.
El 56% de las personas encuestadas a nivel global están preocupadas por el uso de sus datos que hacen las soluciones de inteligencia artificial y la toma de decisiones automatizada, según un relevamiento privado.
Otro de los inconvenientes detectados es que los usuarios consideran que no pueden proteger adecuadamente sus datos, principalmente porque no existen precisiones sobre lo que las empresas acopian y hacen con esa información, según el estudio de privacidad realizado por la empresa Cisco.
Este viernes es el día Día Internacional de la Protección de Datos Personales, por el aniversario de la aprobación en Europa del convenio 108, al cual adhirió la Argentina.
El Estudio sobre la Privacidad de los Datos en 2022 de Cisco relevó la opinión de más de 4.900 profesionales de 27 países.
Desde la empresa argentina VU Security destacaron que en el primer semestre del año 2021 se registraron tantos ataques a la seguridad como en el curso de 2020 y que en el país se verificó un incremento del 70% de casos de delitos informáticos entre el 2019 y el 2020.
El incremento «equivale a todos los delitos cometidos en los 5 años anteriores a la pandemia», señaló la firma local.
En Argentina rige la Ley de Protección de Datos Personales Nº 25.326, que resguarda a las personas para que sus datos no sean utilizados sin su consentimiento, habilita solicitar la localización de estos en bases de datos públicas y privadas, actualizarlos, borrarlos o mantenerlos confidenciales.
«La masificación de la digitalización requiere de medidas que alineen a todos los sectores, pero es primordial contar con programas de educación y concientización que sean gratuitos y federales», consideraron desde la empresa nacional.
Remarcaron que «los datos son un activo y nosotros debemos actuar como sus defensores».
Los ataques a bases de datos «a nivel global contra redes corporativas aumentaron en un asombroso 50% con respecto al año anterior», indicó la compañía Check Point Research.
Precisaron que el sector de educación e investigación fue el más afectado, con un promedio de 1605 ataques por semana, estando muy cerca las organizaciones gubernamentales, compañías de comunicaciones y los proveedores de servicios de Internet.
Los ataques al sector de salud aumentaron un 71% comparado a los niveles previos a la pandemia, y el correo electrónico se volvió la forma más popular de distribución de malware a lo largo de estos dos años, que ahora ya representa el 84%.
Un tercer estudio, en este caso realizado por la consultora KPMG, en América Latina y Norteamérica, arrojó que el 83% de las más de 600 personas consultadas indicaron que su empresa «ha padecido al menos un ciberataque en los últimos 12 meses, en tanto que un 71% aseguró haber sufrido fraudes».
Según esta investigación, de las empresas del continente «muchas cuentan con defensas limitadas» y remarcaron que «el cambio hacia el trabajo híbrido y remoto está provocando que los controles existentes sean cada vez menos efectivos», según difundieron.
En América del Sur, según Ana López Espinar, socia líder de Forensic Services de KPMG en Argentina y Co-líder en América del Sur, “los resultados de la encuesta son tan esclarecedores como preocupantes, especialmente si tenemos en cuenta la mayor incidencia que evidencian sus resultados tanto en materia de probabilidades de participación en un fraude, como ante el riesgo que suponen los ciberataques».