Ocurrió el fin de semana, a metros de la estación de servicio próxima al Boulevard. Una turista comentó lo sucedido.
Inés Palamara y su familia son entrañables turistas de la comarca, los cuales hace más de 30 años la visitan asiduamente, sin importar los casi 700 kilómetros que deben recorrer desde su casa en Ituzaingó hasta este punto del mapa tan especial para ellos.
Pese a pisar los 80, la pareja se mantiene activa, y es habitual verla caminando y recorriendo los distintos atractivos que el entorno les ofrece. Sin embargo el fin de semana pasaron un momento de zozobra tal, que la propia Inés buscó difundir para que la experiencia no se repita.
“En la avenida San Martín, frente a la estación de servicio han arreglado los cordones, pusieron un tutor de hierro junto con la madera que servía de sostén, pero luego quitaron esa madera y ese pedazo de metal quedó ahí aunque a simple vista no se ve” comenzó su relato.
Siguiendo con el testimonio, la visitante reconoció que “veníamos por el boulevard y retomamos porque buscábamos un negocio. Giramos como quien va a la estación de servicio, y ahí reventamos el neumático automáticamente”.
Reconociendo que la situación podría haber sido mucho más grave, Inés reflexionó sobre lo ocurrido: “la gente cuando va a cruzar, mira a ver si no vienen autos, no si hay hierros incrustados en el piso que nos pueda hacer un daño grave”.
Y sin buscar ser fatalista, analizó que “tienen que hacer algo, porque después aparece como en la ruta, el cartelito o la casillita, conmemorando el lugar donde se mató alguno”.
