Actualmente a préstamo en Patronato de Paraná, el futbolista uruguayo de Estudiantes enfrentará un juicio oral acusado de abusar sexualmente de una joven en La Plata en febrero de 2021.
El futbolista uruguayo Diego García, actualmente jugador de Patronato de Paraná, será sometido a juicio oral tras la decisión de la Justicia de garantías de La Plata que avaló la investigación en la que se acusó del abuso sexualmente de una joven ocurrido en febrero de 2021, informaron este domingo fuentes judiciales.
El juez de Garantías Pablo Raele rechazó los planteos de la defensa sobre pedidos de nulidades y sobreseimiento de acusado, y elevó el expediente para que sea debatido en juicio oral por el delito de «abuso sexual con acceso carnal» hacia una joven.
En su resolución, el juez Raele contestó cada uno de los planteos de nulidades de la defensa a cargo del abogado Diego Hernán Bandin, al tiempo que descartó el sobreseimiento intentado por esa parte y recordó que el caso debe ser analizado «con perspectiva de género».
El jugador, que habitualmente es titular en Patronato de Paraná, donde está préstamo hasta diciembre de este año, tiene un contrato vigente con Estudiantes hasta junio del 2023, fecha en la que la institución platense adelantó que no le renovará el vínculo.
García podría ser condenado a una pena de cumplimiento efectivo de entre 6 y 15 años, y si bien atravesó el proceso en libertad, tiene prohibido salir del país.
El hecho que provocó la denuncia contra García se produjo en una casa quinta del barrio El Rodeo, en la localidad de Abasto, partido de La Plata, el 24 de febrero del 2021, donde participaron otros futbolistas y chicas pero ninguno fue alcanzado por la denuncia, y sólo debieron presentarse ante la justicia como testigos.
En su momento Estudiantes activó inmediatamente sus protocolos de género, separó al jugador del plantel hasta que un pedido de su abogado esgrimiendo que «no se le podía impedir el derecho al trabajo» lo devolvió a los entrenamientos pero nunca más volvió a jugar. Primero se lo cedió a préstamo a Talleres y luego a Patronato, donde tuvo bastante reticencia a su llegada.