La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) clausuró 23 locales en la Ciudad y el Gran Buenos Aires por la no emisión de tickets o facturas y la falta de controladores fiscales.
En el marco de varios operativos, el organismo recaudador clausuró comercios de diversos rubros, tales como venta de ropa, playas de estacionamiento, fábrica de pastas, restaurantes, supermercados, heladerías y relojerías, entre otros, en los barrios porteños de San Cristóbal, Montserrat, Villa Crespo, Caballito, Balvanera y Constitución, así como en Villa Celina, Villa Ballester, González Catan e Isidro Casanova en el Gran Buenos Aires.
Todos los establecimientos sancionados presentaban irregularidades en la facturación, ya sea por la no emisión de comprobantes de venta o la falta de controladores fiscales. En la mayoría de los casos, las clausuras son por un plazo que va desde los 3 hasta los 8 días.
Además, se clausuró una confitería sobre la Avenida de Mayo, por probadas maniobras realizadas para ocultar maliciosamente la verdadera magnitud de su actividad económica y obstaculizar las tareas de verificación y fiscalización.
Por otra parte, se detectó una panadería en la Ciudad de Buenos Aires cuyo propietario registraba una baja en el régimen de Monotributo desde el año pasado; es decir que operaba sin estar inscripto en el organismo.
Una situación similar ocurrió con un lavadero de autos en Villa Ballester, en donde su responsable figuraba dado de baja ante la AFIP desde 2004. Además, intentó engañar a los inspectores exhibiendo talonarios de facturas con el número de CAI (Código de Autorización de Impresión) adulterado.