El Oficial Principal Franco Ragni brindó detalles sobre el operativo realizado esta madrugada en una vivienda de calle Estrada, en Sierra de la Ventana. “No tuvimos ningún tipo de resistencia” confirmó.
Toda la comarca aún se encuentra perpleja por una causa que salió a la luz hace pocas horas, enmarcada dentro de uno de los peores vejámenes de nuestra sociedad: la pornografía infantil.
Al respecto el oficial principal Franco Ragni brindó detalles del operativo realizado en las primeras horas de este martes. Al respecto, inició diciendo que “tanto mi personal como yo no dormimos anoche”.
Según manifestó, “es una causa que la inició la División de Cibercrimen, es una investigación que la llevaron ellos a cabo y en el día de la fecha, el Juzgado de Garantías N° 4, ordena el allanamiento a una finca en la calle Estrada al 100, por lo que comúnmente se conoce como pornografía infantil”.
Como resultado de esto “se logró secuestrar la totalidad de los artefactos electrónicos, ya sea celulares y computadoras. Si bien no hay medidas restrictivas de libertad para los moradores de la finca, el allanamiento fue altamente positivo”.
Buscando dar más precisiones, confirmó que “es una investigación que lleva mucho tiempo. La División de Cibercrimen cuenta con el conocimiento y las herramientas necesarias. Según me comentaron hace varios meses estaban tras los pasos”.
En tanto que en lo que sigue, “ahora la investigación sigue su curso. Esta División deberá analizar las imágenes, los videos. No se descarta que en un futuro haya una medida restrictiva para la persona que vive ahí. Ahora viene la etapa donde la justicia toma estas pruebas y determina qué se hace”.
Tratando de explicar los pasos dados y los que vendrán a futuro, el oficial explicó que “toda investigación tiene tres etapas. El antes, donde se recopila pruebas para solicitar un allanamiento. Luego el durante, que es el allanamiento. Y después la etapa posterior, donde se pone toda esa prueba para vincularla a la causa”.
Volviendo a lo ocurrido en la madrugada, Ragni informó que “cuando nosotros ingresamos había un hombre y una señora. La investigación se centra sobre uno de los moradores. No tuvimos ningún tipo de resistencia, hubo plena colaboración de los moradores”.
Por último sostuvo que para este procedimiento “vinieron unos cinco efectivos de Cibercrimen, más la colaboración de la Subestación a mi cargo. Llevó un tiempo porque hubo que registrar la propiedad y la requisa personal, además de la identificación de los mismos”.