A un año de haberse iniciado, el programa nacional Mi Pieza ya alcanzó a 176.779 beneficiarias de todo el país, que implica una mejora de las condiciones habitacionales para más de 765.000 personas. El objetivo del programa es proporcionar financiamiento a mujeres de barrios populares para realizar obras de ampliación habitacional y mejoras edilicias de sus hogares.
En la provincia de Buenos Aires se adjudicaron 93.222 obras, de las cuales ya finalizaron el 59% (55.390 obras).
Según el informe de impacto presentado por la UCA en octubre, casi la mitad de las mujeres amplió su vivienda; y más del 90% cree que las obras mejoran la convivencia, la salud del grupo familiar y la seguridad física del hogar.
Conducido por Fernanda Miño, Secretaria de Integración Socio Urbana del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, el programa se propuso reducir la brecha de desigualdad de género y mejorar la calidad constructiva de las viviendas en barrios populares, además de fomentar la reactivación económica.
En los barrios populares, el 64% de los hogares tiene como responsable a una mujer, de las cuales un 40% vive en condición de hacinamiento y un 20% conforma hogares monoparentales [Diagnóstico realizado por el ReNaBaP (Relevamiento Nacional de Barrios Populares)]. A partir de esta situación, el programa reconoce el rol protagónico de las mujeres en los barrios populares e incentiva la toma de decisiones e implementación de la política de mejoramiento de vivienda, pensada y planificada por una mujer, en base a sus necesidades y las de su familia.
“Es clave para avanzar con la misión de integrar los barrios a través del acceso a los servicios básicos, porque sabemos que no es posible garantizar conexiones seguras de agua, electricidad, cloacas y gas en viviendas de extrema precariedad”, expresó Miño.
Sobre Fernanda Miño:
Es militante social y política, presidenta del FISU (Fondo de Integración Socio Urbana) y fundadora de la Mesa Nacional de Barrios Populares. Además, es vecina del barrio La Cava, donde se crió junto a sus 8 hermanos y sus padres oriundos del Chaco.
A los 12 años necesitó dejar la escuela para trabajar como empleada en casas de familia, y recién pudo retomar sus estudios cuando fue adulta.
Con su marido, “abrieron” el patio de su casa para construir el espacio comunitario «EnBarriarte», brindando apoyo escolar y talleres de artes y oficios, espacio que hoy trabaja en la asistencia de cientos de vecinos del barrio La Cava.
A partir de ese momento, se volcó a la militancia social, acompaña procesos de urbanización y trabajo territorial en distintos distritos del conurbano y de CABA.
En 2016 coordinó el Relevamiento Nacional de Barrios Populares en San Isidro, impulsando
la creación de la coordinadora Barrios en Red y del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) en el distrito. En 2017 participó en una campaña electoral encabezando la lista de concejales de Unidad Ciudadana.
En 2018, surgió la Mesa Nacional de Barrios Populares que nuclea referentes de todo el país de las organizaciones sociales CTEP, CCC, Barrios de Pie, Techo y Cáritas. Desde allí, impulsó un programa para la integración social y urbana de todos los barrios del país.
En el HCD de San Isidro, donde trabajó con asistencia perfecta, Fernanda presidió el bloque de Unidad Ciudadana y en 2019 logró unificar el trabajo legislativo del Frente de Todos, espacio por el cual fue precandidata a intendenta. Ese mismo año consiguió impulsar y
aprobar una ordenanza que genera un marco legislativo para avanzar en la integración socio urbana de todos los barrios populares de San Isidro.
Desde 2019, como Secretaria de Integración Socio Urbana del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, trabaja para mejorar la calidad de vida en los más de 4400 barrios populares del país: a través del acceso a la red de agua, cloacas y electricidad, y regularización de la tenencia de la tierra en favor de las y los vecinos.