Un fiscal pidió cuatro años de prisión para Rafael Di Zeo, uno de los jefes de la barra brava de Boca Juniors, y tres años de cárcel para dos miembros de “La 12”, en el marco de un juicio por el crimen a balazos de dos hinchas “xeneizes”, ocurrido en julio del 2013 en las inmediaciones del estadio del club San Lorenzo de Almagro, informaron hoy fuentes judiciales.
Así lo solicitó el fiscal Aldo de la Fuente ante el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional (TOC) 13 tras considerar que «Rafa» Di Zeo fue responsable del delito de “instigación a la formación de grupos destinados a cometer delitos en el marco de un espectáculo deportivo”, dentro del debate oral que investiga los homicidios de Marcelo Carnevale (33) y Ángel Díaz (44).
Por ese mismo delito, el representante del Ministerio Público pidió a los jueces Diego Leif Guardia, Adolfo Calvete y Enrique Gamboa, que Cristian Andrés “Fido” de Vaux, sea condenado a una pena de tres años y seis meses de prisión, de acuerdo con lo informado por el sitio institucional www.fiscales.gob.ar.
A su vez, el fiscal requirió que Walter Fabián “Tintín” Coronel reciba tres años de cárcel por la “introducción de armas en el contexto de un espectáculo deportivo”.
En ese sentido, De la Fuente solicitó a los magistrados que se tenga en cuenta la «reincidencia» de Di Zeo y Coronel en este tipo de hechos, mientras que sostuvo que los tres acusados deben ser inhabilitados para concurrir a 1.000 metros a la redonda de una cancha de fútbol durante la celebración de un partido.
De esta manera, el fiscal consideró en su alegato un cambio de calificación en comparación con la imputación con la que se llegó a juicio y que estaba plasmada en el requerimiento de elevación a juicio realizado por la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 2, a cargo de Santiago Vismara.
En esa instancia, se había acusado a Di Zeo y De Vaux como instigadores de los delitos de “homicidio agravado por haber sido cometido con violencia contra las personas mediante el empleo de un arma de fuego en dos hechos; lesiones graves agravadas por haber sido cometidas con violencia contra las personas mediante el empleo de un arma de fuego en dos hechos; y abuso de armas en cuatro hechos”, mientras que a Coronel se lo había señalado como “partícipe necesario” de aquellos ilícitos.
Según las fuentes, dicha decisión se debió a que la fiscalía “no logró determinar la identificación de las personas que efectuaron los disparos causantes de aquellas consecuencias”.
El doble crimen de Carnevale y Díaz fue cometido la tarde del domingo 21 de julio de 2013, en la previa de un partido amistoso entre Boca y San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro, del Bajo Flores porteño.
Carnevale cayó muerto de un tiro en el tórax en el cruce de Lafuente y Ana María Janer, donde se produjo la pelea entre los dos grupos de barras, mientras que Díaz falleció minutos después en el Hospital Santojanni a raíz de una herida de bala en la región dorsal.
El mismo día del crimen, el padre de Carnevale acusó a Di Zeo de ser uno de los autores del hecho, mientras que la defensa del líder de «La 12» negó cualquier tipo de vinculación con lo sucedido.
Durante la pesquisa se analizaron distintas imágenes de las cámaras de seguridad en las que quedaron registrados en la escena del crimen un Ford Focus presuntamente de Coronel y un motociclista con casco que se sospecha era Di Zeo.