El papá de Micaela García y uno de los impulsores de la ley que lleva su nombre, se refirió a la charla que darán este viernes en la Biblioteca de Tornquist.
No solo aprenden día a día a convivir con el dolor, sino que han tomado fuerzas y buscan generar un cambio en la sociedad. De eso se trata el trabajo que vienen haciendo Néstor y Andrea, padres de Micaela García, víctima de femicidio en 2017.
A través de su lucha consiguieron la creación de la ley 27499, la cual lleva el nombre de su hija. Con la fundación que presiden llegarán a la comarca este viernes, para llevar adelante una charla sobre violencia de género.
Al respecto Néstor explicó, en un nuevo espacio de Tiempo Educativo, que “es algo que venimos haciendo habitualmente. Siempre con talleres y capacitación. El municipio de Tornquist ha adherido y por eso haremos un taller de sensibilización, en la Biblioteca de Tornquist, a partir de las 18 este viernes”.
Al mismo tiempo confirmó que “llevamos una biblioteca feminista, que junto con algunas cosas que confeccionamos en la fundación, lo utilizamos para recaudar fondos y de esa manera continuar con las acciones gratuitas”.
Recordando, mencionó que “la ley se vota en diciembre de 2018. Se promulga el 10 de enero. En ese 2019 algunas provincias comenzaron a adherir. Desde la fundación comenzamos a hacer un seguimiento para ver cuáles adhería y cuales tenían interés. Conseguimos los teléfonos de los legisladores provinciales y les acercamos los proyectos, nuestra ayuda. Había diez provincias que no habían presentado nada. Fuimos participando en la redacción de seis leyes provinciales”.
Sobre lo que buscan con este tipo de talleres, “Yuyo” aseguró que “siempre decimos en la fundación, donde somos 17 personas que podemos capacitar, que lo más importante son las conclusiones que saca cada uno de los asistentes, sin hacer una bajada de línea. Sí hay cosas que decir a lo largo de la charla, pero no son opinables, son leyes. Esas cosas sí”.
Mientras que sobre lo que los motivó a dar este paso tras la tragedia, admitió que “cuando se encontró el cuerpo de Micaela después de una semana de buscarla, y después de hacer nuestro duelo, de agradecer a la policía y la fiscalía por todo lo que habían hecho, le dijimos a los vecinos y la prensa que nuestra vida había cambiado, y que nos íbamos a involucrar a cambiar la sociedad por la cual Micaela luchaba y militaba”.
