Miriam Mayorga se recibió de médica en 2019 en la Universidad Abierta Interamericana pero tuvo que postergar la residencia por la posibilidad de jugar su primer Mundial en Francia. Ahora, la defensora está a punto de intervenir en su segunda Copa del Mundo FIFA en Australia y Nueva Zelanda, y la quiere disfrutar.
(Por Marina Butrón, enviada especial Télam)
«Jugar otro Mundial me llena de orgullo», aseguró la ´Doc´ en una charla con Télam.
«Mi objetivo era estar en las 23 jugadoras para este Mundial, que seguramente será el último para mí como para muchas, y quiero disfrutar desde el lugar que me toque. Es la máxima competencia y ser parte de esto me llena de orgullo», contó Mayorga.
Con 33 años, la nacida en Bariloche fue tricampeona con Boca hace pocas semanas: «Tuvimos dos días de descanso nada más, pero representar a tu país en un Mundial es lo más importante que te puede pasar. Sabíamos que íbamos a tener que cambiar el chip rápido y cada una llegar de la mejor manera a la Selección».
Mayorga viajó con el segundo grupo de la Selección de Ezeiza a Auckland y lo primero que metió en la valija fueron sus botines, dos paquetes de yerba y las canilleras decoradas con fotos de su familia.
Sobre las diferencias en la previa a Francia 2019, la zaguera destacó que «cambió mucho para mejor. Nos sentimos más acompañadas y nos dan más atención que hace cuatro años atrás. Ojalá que esto se perpetúe, que acompañen siempre a la Selección femenina, no solo en los Mundiales. Estamos en crecimiento».
Por otra parte, Mayorga recalcó que «nuestra realidad es muy distinta al masculino. Ganar la Copa en Qatar lo vivimos como hinchas argentinos, pero nosotras tenemos otros objetivos. Es un contraste grande pero es importante que se conozcan a las jugadoras, sus historias y el esfuerzo que hacen por estar acá».
Si alguien sabe de esfuerzos es ella. Atrás quedaron las noches sin dormir para estudiar y las corridas para llegar a entrenar y a los partidos. Cuando hacía la carrera universitaria mientras jugaba en UAI Urquiza, Mayorga festejó cuatro títulos nacionales. Junto a Las Gladiadoras de Boca consiguió cinco títulos del Campeonato Argentino y llegó a una final de Copa Libertadores.
¿Cómo fue recibirse de médica siendo futbolista? «La verdad es que resultó muy difícil, lo iba viviendo y pasando en el día a día. La medicina es mi otra pasión. Hoy por hoy no puedo ejercerla por los tiempos que le dedico al fútbol pero es algo que me apasiona, siempre estoy leyendo y estudiando para mantenerme al tanto», admitió la ‘Doc’.
«En primer año, mis compañeras me pedían consejos cuando les dolía algo y yo no tenía ni idea. Ahora tal vez les puedo decir más pero desde mi lugar de jugadora porque tenemos grandes médicos en el plantel», aclaró.
Al igual que toda la Selección, Mayorga ya palpita lo que será el debut contra las italianas, el 24 de julio en el Eden Park de Auckland, por el primer partido del grupo.
«De Italia venimos viendo videos y dibujos desde diciembre; dónde son más fuertes, dónde son más verticales. Estamos trabajando en los detalles no solo en videos sino en el campo también nos van hablando los técnicos para mejorar nuestra atención», explicó la jugadora que se metió en el fútbol por su papá -lo iba a ver jugar en un equipo de Bariloche con sus tíos- y debutó en el seleccionado en 2017.
Sobre el equipo, Mayorga comentó que «se está entrenando bien, con entrenamientos más cortos pero con una intensidad que se trata de mantener».
Más allá del grupo complicado que tocó en el sorteo, la defensora apuntó: «Nuestro objetivo más grande es ganar un partido, que es algo que la Selección nunca pudo hacer. Hay un convencimiento bastante grande por parte del cuerpo técnico y de las jugadoras de que se puede dar».
En el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, Argentina buscará dar la sorpresa, porque va de punto contra Italia y Suecia. «Ojalá haya lindas sorpresas aunque sabemos quiénes son los favoritos, los grandes equipos de Europa y Estados Unidos», analizó.
Con respecto al tricampeonato con Boca, en el que las xeneizes tuvieron que jugar un partido de desempate con UAI Urquiza, Mayorga consideró que «fue un torneo con mucha adrenalina, pudimos defender el título que tanto buscamos pero significó una gran motivación lo parejo que estuvo. Antes los resultados en el fútbol femenino eran más predecibles y abultados. Eso cambió, no sólo con Boca sino con todos los equipos, y está buenísimo porque la mentalidad y la exigencia de las jugadoras empieza a cambiar y eso nos prepara mejor a todos».