El escritor e historiador repasó las ideas y vueltas que ha tenido la provincia de Buenos Aires a lo largo del tiempo. “Duhalde contrató a un parapsicólogo para romper una maldición” afirmó.
El escritor e historiador Luis Gotte repasó aristas poco conocidas del camino transitado por la provincia de Buenos Aires hasta nuestros días.
Al respecto, en el inicio de la charla afirmó que “por sentido común, cuando ves el mapa de la provincia, Mar del Plata debía ser la capital. Incluso se debería haber partido en dos, y la segunda provincia debería haber tenido en cabecera en Bahía Blanca”.
En esa línea aseguró que “hubo tres gobernadores que la intentaron dividir, y los tres murieron el mismo año que gobernaron, en 1913. Llamativamente los tres murieron de causa súbita. Dividir la provincia en dos, implicaba que apareciera el puerto de aguas profundas y afectaría los intereses de Capital Federal. Tras estas muertes no se avanzó con el proyecto”.
En línea con esa idea, afirmó que “cuando se funda la ciudad de La Plata, Rocha invita al presidente Roca, pero por una pelea que tuvieron, ya que Rocha quería ser presidente, el vigente monarca no fue. Incluso simpatizantes de Roca llevaron a una bruja ese día, y dicen que el hechizo que hizo fue tan fuerte que al día de hoy ningún gobernador bonaerense ha podido ser presidente”.
Y llevándolo hasta la historia actual, aseguró que “Duhalde contrató a un parapsicólogo para romper el hechizo. No le dio por elección democrática. Llegó por decantación”.
En otro pasaje de la charla comentó que “desde 1882, cuando se funda La Plata, el 70% de los gobernadores de la provincia han sido nacidos en Capital Federal. Incluso muchos no cumplen con lo que exige la constitución de que tienen que vivir en la provincia 5 años antes de presentarse como candidatos. Los últimos tres no vivieron siquiera meses”.
Por último, y hablando sobre lo ocurrido tras la última modificación constitucional a nivel nacional, en 1994, “cuando debió reformarse la constitución bonaerense, Duhalde presionó para que no se modifiquen algunos artículos y de esa manera los municipios no ganaron autonomía. ¿Por qué? Porque el presidente saltaría al gobernador y hablaría directamente con los intendentes”.