La especialista en medicina natural, Anabella Botto, brindó detalles prácticos para iniciarse en la meditación, derribando la mismo tiempo varios mitos que hay al respecto.
En una nueva entrega semanal del micro de vida sana, la especialista en medicina natural, Anabella Botto, brindó conceptos básicos para iniciarse en la meditación.
Al respecto explicó cómo primera medida que “busquemos silenciar el afuera y el ruido interno, y busquemos conectar con nosotros”.
Y de la mano con eso comenzó a “derribar varios mitos. A meditar se aprende, es una práctica que mientras más la hagamos menos nos costará alcanzar. Nadie puede disfrutar de las fiestas de fin de año o la misma vida, angustiado, ansioso, estresado”.
En ese aspecto resaltó que “la meditación puede ser practicada por cualquier persona que quiera hacerlo, más allá de su edad, conocimiento, nivel social o educativo. Y lejos de lo que muchos creen no hace falta considerarte espiritual o ser parte de una religión. Meditar es solo un momento de encuentro con nosotros mismos”.
Al tiempo que especificó que “tiene efectos preventivos y terapéuticos sobre la fisiología y aspectos psicológicos de las personas. Depresión, ansiedad, ataques de pánico, entre otras patologías de salud, en las que meditar hace bien”.
Sumándole que “otro gran mito es que se trata de obligar a la mente que se tranquilice. Sino buscar la tranquilidad que ya tiene, y para eso hay que ayudarla. La realidad es que sin descanso el cuerpo se estresa y no se generan los procesos necesarios para su reparación”.
Con todo eso en claro explicó “cinco pasos simples y claves para meditar” iniciando que “lo primero es elegir un tiempo libre, donde no haya distracciones. Lo segundo es sentarte en silencio, tranquilamente, en un lugar cómodo, idealmente con las palmas hacia arriba, y pondremos el foco en cómo se estira la columna”.
Continuando sostuvo que “el tercer paso es permitir a tus ojos reconocer el ambiente que te rodea y a tus oídos recibir los sonidos, sin juzgarlos. Solo contemplar. Vas a relajar tus músculos, y después de un tiempo vas a cerrar los ojos y atraer la atención hacia nuestro interior”.
A eso le sumó que “en el paso cuatro veremos cómo se mueven los deseos, los pensamientos, las emociones. Los observaremos como un río con caudal y vamos a mirar esa actividad como si fuesen pasando, sin juzgar. Solo es observar”.
Por último “en el paso cinco, si te cuesta mucho esto de no entregar energía a los pensamientos, vamos a sentir como el aire que ingresa es frío y al sacarlo es tibio. En este estado, la paz y la alegría descenderán como bendiciones. Abrite a recibirlas”.
Concluyendo con que “con que te puedas tomar el tiempo para seguir estos cinco pasos, ya estarás meditando”.