La oposición se impuso en las cinco provincias más pobladas del país; el Frente de Todos perdió 13 provincias en comparación con las PASO 2019.
Una ola amarilla volvió a teñir la Argentina. Juntos se impuso con autoridad en casi todo el país: sus listas de diputados nacionales ganaron en 15 provincias. La oposición se impuso de norte a sur, de Jujuy a Tierra del Fuego. Una victorial electoral que incluye a los cinco distritos más poblados del país: Buenos Aires, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza.
La derrota del Frente de Todos es aún más dolorosa si se mira en el espejo de las PASO 2019, esa elección que vio nacer a la alianza que desplazó a Mauricio Macri de la Casa Rosada. El kirchnerismo y sus aliados perdieron en las urnas 12 provincias que habían ganado dos años atrás. Buenos Aires, bastión electoral de Cristina Kirchner, es el distrito donde el oficialismo dejó una mayor cantidad de votos. Santa Fe, que tuvo una interna con sabor amargo, fue otro de las provincias donde quedó relegada.
Juntos y sus aliados se impusieron en Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires, la zona más densamente poblada del país, que fue rebautizada como Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) durante la pandemia. Es justamente en esas zonas urbanas donde la crisis económica pega más fuerte. En la provincia de Buenos Aires, distrito gobernador por el kirchnerismo más puro, la oposición superó el 38,1% de los votos y sacaba casi 5% de ventaja sobre el kirchnerismo al cierre de esta edición.
La lista encabezada por Diego Santilli, que contaba con el aval de Horacio Rodríguez Larreta, se impuso en la interna con una diferencia de 20 puntos sobre el radicalismo. Del otro lado, el debutante Facundo Manes quedó segundo aunque con una buena elección que contribuyó con más del 15% de los votos de la oposición en la provincia.
En la Ciudad, territorio históricamente dominado por el PRO, la ventaja fue más cómoda: los tres candidatos de Juntos superaron el 48% de los votos. Como estaba previsto, la boleta encabezada por María Eugenia Vidal, otra candidata que contó con la bendición del jefe de gobierno porteño, fue la que más apoyos obtuvo. El kirchnerismo volvió a perder votos en un distrito que sufrió -además de la pandemia- la quita de fondos de la coparticipación por parte de Alberto Fernández.
Victoria opositora en el centro
La oposición también se impuso con holgura en el centro del país. Juntos ganó en Córdoba con una ventaja aún mayor a la que cosechó en las elecciones anteriores: reunió el 47,5% de los votos, seis puntos más que en las PASO de 2019. La lista de diputados encabezada por Rodrigo de Loredo, que recibió el aval de Mauricio Macri, se impuso en la interna de la oposición. El segundo lugar fue para Hacemos por Córdoba, la fuerza impulsada por el gobernador Juan Schiaretti. El kirchnerismo quedó en tercer lugar, con apenas el 10,9% de los votos, 12 puntos menos que en las PASO de 2019.
Juntos ganó en la provincia de Santa Fe, uno de los triunfos menos esperados de estos comicios. La oposición se quedó con el 41,4% de los votos, 10 puntos por encima del peronismo, que hace dos años recuperó esa provincia después de un largo período en manos del socialismo santafesino. Las listas encabezada por el radical Mario Barletta y la periodista Carolina Losada se imponían en la interna opositora.
La derrota en Santa Fe es especialmente dolorosa para Cristina Kirchner, que se enfrentó al ex ministro Agustín Rossi por mantener su candidatura, un enfrentamiento que le costó el cargo al histórico dirigente kirchnerista. La vicepresidenta, en cambio, apoyó a la lista impulsada por el gobernador Omar Perotti, que finalmente se impuso en la interna peronista, pero no logró que el Frente de Todos sumara la mayor cantidad de votos en toda la provincia.
Entre Ríos fue otra provincia del centro del país que Juntos “recuperó” en estas PASO. Sacó el 51,8% de los votos, una diferencia de más de 20 puntos con el oficialismo. Ni siquiera los números que había obtenido el Frente de Todos en 2019 habían sido tan beneficiosos para el vencedor de ese momento.
Cuyo y Santa Cruz, también de Juntos
La oposición se impuso en Cuyo. La lista encabezada por Julio Cobos ganó en Mendoza con el 43,7% de los votos, una diferencia de casi 20% puntos respecto del kirchnerismo. Juntos también se quedó con San Luis, donde la boleta impulsada por el gobernador Claudio Poggi llegó al 47,2% de los votos. La oposición desplazó así a la lista que apoyaba Alberto Rodríguez Saa, que sumó el 37%. San Juan fue una excepción en Cuyo: la lista del Frente de Todos apoyada por el gobernador Sergio Uñac logró imponerse con el 42,8% de los votos.
En la Patagonia, Juntos también se animó a quitarle Santa Cruz al kirchnerismo. Las seis listas internas que acumuló la oposición sumaron el 38,6% de los votos, una diferencia de más de 10 puntos con el oficialismo. Cristina Kirchner, que ayer votó en Río Gallegos, todavía reside en la provincia que fue la cuna del kirchnerismo. La oposición también se impuso en Tierra del Fuego, otra de las provincias donde había perdido en las PASO de 2019.
El kirchnerismo ganó en apenas siete provincias; perdió 13 distritos en comparación con las PASO de 2019. Las victorias del Frente de Todo se condensaron principalmente en distritos ubicados en el norte del país. Fueron triunfos en provincias donde históricamente se impone el peronismo: Formosa, La Rioja, Tucumán, Salta, Catamarca, Santiago del Estero y San Juan.
El Frente de Todos ya había ganado estas provincias en las PASO de 2019. El triunfo es especialmente importante, por su caudal electoral, en Tucumán. El candidato más votado fue el diputado Pablo Yeldin, un hombre cercano al gobernador Juan Manzur y espada del kirchnerismo en la comisión de Salud de la Cámara de Diputados. A última hora, el oficialismo también sumó una ajustada victoria en Salta. La boleta del Frente de Todos sumó el 30,1% de los votos, mientras que la oposición llegó al 29,7%.