Don Arturo Jauretche solía decir: ¡dadme un punto de coincidencia y haremos una patria!” y aunque sabemos que vamos a necesitar más que un punto de coincidencia, después de descansar unos días, nos juntamos nuevamente para reanudar la tarea donde la habíamos dejado al terminar el 2016.
El 2017 no se presenta nada fácil. Siguiendo el patrón establecido desde el mismo 10 de diciembre de 2015, cada jornada comienza con una mala nueva para las mayorías populares.
Nos abocamos a la elaboración de una agenda de trabajo que abarca un amplio abanico de temas referidos a la educación, cultura, salud, trabajo, cooperativismo, medio ambiente, etc., que serán presentados a la comunidad en nuestro programa de radio “Si no hay amor” y cuyo tratamiento apuntará al fortalecimiento de los principios que dieron nacimiento al Frente Popular “25 de febrero”.
Abordaremos la cultura y la educación mediante la organización de seminarios, mesas redondas, debates, la publicación de un boletín, con la participación de profesionales de la comarca y de invitados especiales a nivel provincial y nacional.
Nos anima la idea de convocar a la comunidad y sus instituciones para construir los consensos indispensables conducentes a proteger sus intereses, por sobre las diferencias, a canalizar reclamos y demandas, a encontrar las mejores soluciones a las problemáticas que nos afectan: a promover acciones que repercutan favorablemente en la vida cotidiana del distrito.
Como el primer día, seguimos firmes en nuestro propósito de no resignarnos ante el avance destructor de un gobierno que vino a cumplir el mandato de borrar por medio de decretos o el uso de la fuerza, toda restauración de derechos, avance contra la pobreza o empleo de la inteligencia en beneficio de la sociedad
Esta realidad tan difícil nos confirma en nuestras convicciones y nos estimula a juntar la energía propia con la de quienes quieran acompañarnos en este desafío de hacernos fuertes en la diversidad, en la solidaridad, en la cooperación, en la alegría y en la esperanza más allá de las dificultades, sin perder de vista que el objetivo es vivir con dignidad en la patria que soñamos.