La federación que nuclea a los docentes de las 32 sedes de la Universidad Tecnológica Nacional (FAGDUT) reclamó hoy que una gran cantidad de profesores universitarios no pudieron acceder a los créditos para compra de equipos informáticos que lanzaron el Banco Nación y el Ministerio de Educación – programa acordado en la negociación paritaria con los sindicatos universitarios – por razones de edad. Asimismo, desde el gremio dijeron que es “insólito que el empleador ponga condiciones etáreas en un crédito para comprar las propias herramientas de trabajo”, y propusieron ser garantes de los afiliados que fueron rechazados.
A principios del mes pasado, el Banco de la Nación Argentina y el Ministerio de Educación nacional lanzaron una línea de crédito específica para docentes de universidades públicas destinada a la compra de computadoras de escritorio, notebooks y tablets – de las empresas que participan en el programa – con una tasa subsidiada del 12% nominal anual.
“El crédito viene a reemplazar justamente la no provisión por parte del empleador del equipamiento y las condiciones de acceso a este crédito deberían ser mucho más amplias”, manifestó el secretario General de FAGDUT, Ing. Norberto Heyaca, y agregó: “Nosotros como gremio nos ofrecemos como garantes del crédito para los afiliados a los que no se les permite acceder al mismo por cuestión etárea”.
El plazo único para cancelar el crédito es de 36 meses en cuotas fijas. Y aquí está el problema: porque implica que un docente con 62 años de edad cumplidos no puede acceder al crédito, ya que el Banco Nación consideró como límite etario la edad máxima de 65 años. Pero se trata de un grave error, ya que la edad máxima prevista para la jubilación en el régimen de los docentes es de 70 años, con lo cual la edad máxima para solicitar el crédito hubiese debido ser, en todo caso, fijada en 67 años.
“Una iniciativa que buscaba tender un puente para facilitar que los docentes tengamos las herramientas necesarias para la modalidad de teletrabajo, terminó siendo contraproducente, porque al final nos encontramos con una gran cantidad de compañeros que no pudieron acceder al crédito”, explicó el titular de FAGDUT.
Estos créditos para profesores universitarios tienen un monto máximo de hasta 150 mil pesos, en el caso de cobrar sus haberes en el Banco Nación, y de hasta 125 mil pesos para quienes lo hacen en otros bancos.
“El programa contempla una oferta de equipos electrónicos costosos que a los docentes se nos dificulta mucho comprar sino tuviésemos el crédito”, acotó el dirigente gremial. Asimismo, desde la entidad sindical contaron que cuando empezó el aislamiento se hizo un acompañamiento “muy fuerte” a los docentes afiliados “dando créditos sin ningún otro requisito que ser afiliado para sanear la necesidad de equipamiento” y “capacitaciones de diversa índole para adecuarse a esta nueva modalidad de trabajo”.
“A base de mucho esfuerzo logramos suplir la presencialidad y consideramos que este accionar de la docencia es digno de reconocimiento, ya que adaptamos la enseñanza al contexto”, indicó el secretario General de FAGDUT, y sobre el crédito que lanzó el Gobierno Nacional opinó: “Ante una nueva muestra de colaboración que estamos haciendo los docentes universitarios, encontramos una traba. Nadie nos consultó sobre las condiciones del crédito antes que saliera”.
“Por más que el interés sea accesible – tasa 12% nominal anual – también podríamos discutir si correspondería que el empleador nos cobre interés para equiparnos para hacer nuestro trabajo, sacando de lado de que como gremio creemos que se nos debería proveer el equipamiento necesario para llevar adelante el teletrabajo”, expresó el ingeniero Heyaca, y ejemplificó: “Es como que a un albañil se le pida que compre su propia máquina hormigonera para trabajar en la obra”.