Ya sea por su comodidad o eficiencia, los medios de pago digitales se consolidan mes a mes como una de las opciones favoritas de los consumidores, que aprovechan los beneficios que estos ofrecen en términos de uso y ahorro. Cómo impacta este cambio en el uso de efectivo
Con el avance de la tecnología, la forma en la que realizamos los pagos y transacciones financieras se ha transformado drásticamente, especialmente durante los últimos años con el auge de las criptomonedas, los QRs y las billeteras virtuales, métodos que retrajeron el uso del dinero en efectivo. Si bien no se puede afirmar con certeza que los billetes desaparecerán por completo en un futuro cercano, es evidente que los pagos digitales han ido ganando terreno y presentan numerosas ventajas con un futuro prometedor.
Es importante destacar que aún existen escenarios donde el efectivo es preferido o necesario, como en transacciones informales, comercios pequeños o en áreas con acceso limitado a la infraestructura digital, lo cual permite una coexistencia basada en las ventajas propias de cada modalidad.
“Sin dudas, la utilización de medios de pago digitales ha llevado a una reducción en el uso de efectivo debido a su comodidad, seguridad y facilidad de uso. De cara al futuro, se espera que las transacciones virtuales continúen expandiéndose y evolucionando. Cada vez más personas utilizan aplicaciones móviles y billeteras digitales para realizar sus pagos, lo que permite realizar intercambios de manera rápida y segura. Adicionalmente, los pagos sin contacto, a través de tecnologías como NFC (Near Field Communication) o códigos QR, también se consolidaron y ganaron popularidad. Estas opciones permiten realizar pagos simplemente utilizando un dispositivo o escaneando un código, sin necesidad de utilizar efectivo o tarjetas físicas” indica Martín Malievac, Director de Investigación y Desarrollo de Napse.
De acuerdo a un relevamiento del Observatorio de Productividad y Competitividad (OPyC) de la Universidad de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (Ucaece), el 74% de las empresas en Argentina utilizan medios de pago digitales. Asimismo, en el último informe de Minsait Payments “Tendencias en Medios de Pago”, se indica que “En 2022, a nivel mundial, se realizaron más de 2.000 millones de pagos digitales minoristas al día, un volumen del que solo participa el 50% de la población adulta . De alcanzarse la inclusión financiera plena serían 4.000 millones de pagos digitales al día, un billón y medio de transacciones al año. La industria ha de innovar para canalizar los cerca de 18 billones de dólares en pagos que las personas todavía realizan cada año en efectivo y cheques hacia las tarjetas y cuentas digitales”.
Sin dudas, los pagos digitales brindan numerosas ventajas tanto para los consumidores como para los comerciantes minoristas, y eso explica el motivo de su creciente adopción y disponibilidad, la cual encontró su punto de inflexión en el año 2020. Entre los beneficios más destacados, según Napse, se encuentran:
Mayor comodidad Permiten a los clientes realizar transacciones de manera rápida y conveniente. Ya sea utilizando tarjetas de débito o crédito, billeteras electrónicas o aplicaciones móviles, es posible completar los pagos de forma eficiente sin tener que depender del efectivo. Esto crea una experiencia de compra más fluida y agradable, lo que puede fomentar la lealtad del cliente y aumentar las tasas de conversión.
Amplia aceptación de diferentes métodos de pago Al implementar pagos digitales, los retailers pueden satisfacer las preferencias de pago de una amplia gama de clientes, evitando perder ventas por falta de flexibilidad y maximizando las oportunidades de venta.
Mayor seguridad y reducción del riesgo de fraude los pagos digitales ofrecen niveles de seguridad más altos en comparación con el efectivo. Estos sistemas utilizan encriptación y autenticación para proteger los datos financieros de los clientes, lo que reduce el riesgo de robo de información. Además, proporcionan un rastro de auditoría claro, lo que facilita la detección de fraudes y la resolución de disputas.
Menos necesidad de manejar efectivo Al utilizar medios de pago digitales, se reduce la necesidad de manejar efectivo, tanto para los consumidores como para las empresas. Esto puede implicar un menor riesgo de pérdida o robo de dinero en efectivo, así como una menor necesidad de administrar y transportar grandes cantidades de dinero físico.
Facilita la expansión a canales de venta en línea Los pagos digitales son fundamentales para los retailers que desean expandirse al comercio electrónico. Al aceptar pagos en línea, los retailers pueden ampliar su alcance y vender a clientes en todo el mundo, lo que brinda oportunidades de crecimiento significativas y mejora la experiencia de compra.
“Al adoptar estas soluciones, los comerciantes minoristas pueden mejorar la experiencia de compra de los consumidores a partir del análisis de la información registrada, optimizar sus operaciones y estar preparados para el entorno comercial digital en constante evolución. La información que registran las transacciones virtuales permite entender las preferencias y hábitos de los usuarios, las cuales son de utilidad para tomar decisiones más informadas en términos de inventario, estrategias de marketing y personalización de la experiencia de compra” agrega Malievac.
Los pagos digitales han tenido un impacto transformador al aumentar la inclusión financiera, especialmente para aquellos consumidores sin acceso a una cuenta bancaria. Gracias a las billeteras electrónicas y aplicaciones móviles, ahora las personas pueden realizar transacciones utilizando sus teléfonos inteligentes, lo que les brinda la oportunidad de participar en la economía digital. Además, estos medios de cobro ofrecen una mayor trazabilidad y transparencia, ya que dejan un rastro electrónico que facilita el seguimiento de los intercambios, prevención del fraude y auditoría financiera. Estos avances impulsan el crecimiento de la economía digital, fomentando los pagos en línea, las compras electrónicas y los servicios digitales, lo que a su vez permite el surgimiento de nuevas empresas y modelos de negocio en este ámbito.
“Ante la multiplicidad de opciones para transaccionar, es crucial para los negocios contar con una herramienta que integre todos los métodos de pago, para agilizar los tiempos, optimizar recursos y evitar errores humanos, lo cual es esencial para brindarle a los clientes una experiencia completa y satisfactoria. Al fin y al cabo, la tecnología está para facilitar la gestión y es indispensable para continuar construyendo el futuro retail. Su adopción le permitirá a los comerciantes minoristas estar más cerca de sus clientes e incluso llegar a nuevos mercados” concluye Malievac.