Esta mañana, FM Reflejos conversó con la Dra. en Biología Nora Sidorkewicj, para informar sobre presencia de serpientes y yararás en la comarca durante esta temporada. Comenta qué especies de ofidios se encuentran en la zona, cómo tomar los recaudos para evitar accidentes y qué hacer en caso de no haber podido prevenir una mordedura de alguna de las yararás.
«La época tiene que ver con que estos animales empiezan su actividad al momento que arranca la primavera. Se van moviendo mucho en esas épocas, en el verano se ven pero están más refugiadas por el calor intenso. En esta época vuelven a verse porque están buscando alimento para resistir el invierno y se están apareando» explica la Doctora cómo es el ciclo de fluctuación de avistajes de estos animales.
«Se detectó que la Víbora de la Cruz es una de las más abundantes en esta zona. No tanto la Yarará Ñata» hace referencia a las especies que tienden a verse en la zona. «Nosotros no tenemos ningún reporte de Víbora de Cascabel. No significa que no haya, pero en la Provincia de Buenos Aires no hay registro» explica, ya que mucha gente las confunde con las Víboras de la Cruz, que cuando está alterada mueve su cola contra el piso, generando un sonido similar a un cascabel.
La Dra. menciona que, desde la Universidad, no cuentan con convenios con instituciones u organizaciones, ya que el trabajo es mucho más profundo que reportar avistajes de estos animales. «Pero siempre estamos al tanto, nos mandan mucha información de gente por interés. Para que les expliquemos o les digamos qué hay que hacer y qué no hay que hacer».
Teniendo en cuenta la situación de inundación sufrida por Bahía Blanca, Nora comenta que muchas personas han avistado algunas serpientes con la crecida del río. «Nos han comentado, no hemos visto fotos, que han aparecido yararás y culebras con la crecida. Hay animales que están bajo tierra que a veces la gente los confunde con culebras. Pero no vimos fotos, supongo que la gente no estaba pendiente a sacar fotos, fue una situación muy peculiar para nuestra ciudad».
«En zonas abiertas, siempre hay que estar prevenido. No hacer senderismo en bermuda u ojotas. Siempre ponerse algo flojo, medias altas, y caminar siempre en zonas con visibilidad y con un palo para ir golpeando y moviendo las cosas que pueden ser dudosas. Siempre ir bien provista de atuendo, pero además siempre pasar por las oficinas de los guardaparques por la información que brindan y para que sepan por dónde vamos a andar» sugiere la Dra. en relación a las excursiones en zonas donde pueden aparecer estas víboras.
Agrega que, en caso de no haber podido prevenir el accidente, «jamás hacer un torniquete porque la yarará tiene un veneno que es destructor de tejido. Si hacemos torniquete, ese efecto lo concentramos y la herida va a ser más grave de lo que era. Además, aflojar todo lo que pueda causar compresión; anillos, pulseras, zapatos, cinturones. Recostarse de manera horizontal y beber mucha agua y, si se puede, lavar la herida con agua y jabón. Rápidamente ir al hospital más cercano». Comenta que es muy importante concurrir a los Hospitales Antiponzoñosos, son los únicos que tienen el suero. En nuestra zona, sería en el Hospital E. Tornquist, el Hospital de Dorrego y en Bahía Blanca, el Hospital Municipal.
«El tiempo adecuado son más o menos 6 horas para que no queden secuelas, pero lo más adecuado es llegar dentro de las 2 horas. Si llega después la persona por cualquier motivo, se le aplicará el suero pero puede llegar a quedarle alguna secuela» hace hincapié la Dra. en la importancia de acudir rápidamente a cualquiera de los centros antiponzoñosos. «Puede quedar una cicatriz deformante y puede haber insuficiencia renal, por ejemplo».
«El animal puede inocular una cantidad de veneno muy variable, de acuerdo a la situación. De acuerdo a esa cantidad de veneno, los médicos pueden estimar de acuerdo a los síntomas, las pruebas de laboratorio, tiempo de coagulación, y de acuerdo a eso es la cantidad de suero que se aplicará. Los sueros de farmacia tienen un poder neutralizante muy bajo, con una ampolla no se hace nada. Es necesario saber cuánto la persona tiene que poner para neutralizar el veneno» advierte sobre la venta libre del suero antiofídico. «Olvidarse de eso, mejor ir al Hospital con el personal capacitado» sugiere.
«La mordedura puede ser mortal o no, de acuerdo a la cantidad de veneno que inoculó el animal. Pero si se aplica el suero, no hay probabilidad que no sobreviva, los sueros son muy buenos» cierra la nota.