El empresario gastronómico a cargo del restaurant del Complejo de Petroquímicos comentó las distintas ofertas que tienen, al tiempo que agradeció por cómo los vecinos de la comarca se han volcado hacia el emprendimiento.
Para muchos suena un poco raro hablar de mariscos en las Sierras, pero en el caso de Jorge Pérez Martin y su señora, fue justamente esa la chispa de ingenio que los llevó a abrir un restaurant que poco a poco ganó el corazón de toda la comarca.
Según el propio Jorge aclaró, “nuestro arrepentimiento fue no haber venido antes, ya que el lugar es hermoso y la gente nos ha apoyado enormemente. Estamos sorprendidos para bien”.
En esa línea contó que “todo nació porque con mi señora cuando viajábamos buscábamos restaurant de mariscos y nos dimos cuenta que en la comarca no había algo específico. Si a nosotros como a un montón de gente le gusta, era cuestión de probar. Yo esperaba esta aceptación”.
De todas formas aclaró que “en la marisquería también hay pastas, carnes y picadas, y a partir de 10 días incorporaremos hamburguesas y comidas a la plancha. Mi hijo se encargará de eso, por lo que traeremos la comida porteña a la Villa”.
Al mismo tiempo admitió que “no trabajamos con menú del día, sino con carta, y nuestra vedette es la fritatta, que es nuestra tabla. Hay gente que viene de Buenos Aires a pedir específicamente eso, por los comentarios que hay en las redes sobre nuestra tabla”.
Por último, y en tono divertido, agregó que “a mí me gusta hablar, me gusta conocer a nuestros clientes. Se dan esas situaciones. Incluso me he quedado hasta las 3 de la mañana charlando con clientes. Mi señora que está en la cocina siempre me pide que me apure, porque me cuelgo charlando”.