Legisladores, representantes de la iglesia y de la sociedad civil, expertos en medio ambiente, científicos del clima, además de líderes indígenas y comunitarios de países como Argentina, Brasil, Uruguay, Ecuador y Colombia se reunirán en la ciudad porteña de Buenos Aires para discutir las amenazas que representan el uso de combustibles fósiles en América Latina, en particular la técnica del fracking para la extracción no convencional de petróleo y gas (también conocida como fracking). La jornada internacional “Cambio Climático y Crisis Ambiental: Los Peligros del fracking y las alternativas para América Latina”, que ocurre el 01 de Diciembre en la Cámara de Diputados de la Nación Argentina, también tiene como objetivo definir estrategias conjuntas de acción en el continente.
Los invitados al evento forman parte de la Coalición Latinoamericana Contra El Fracking, una iniciativa de expansión regional de la COESUS – Coalición No Fracking Brasil por el Clima, Agua y la Vida. El principal objetivo de la coalición es prevenir la expansión de la práctica de la fractura hidráulica a través de políticas públicas y legislaciones, así como la promoción de soluciones independientes e integradores de energía limpia a partir de una base económica sostenible, justa y competitiva.
“La Coalición se propone contribuir técnicamente y apoyar a los países para que asuman una posición de liderazgo mundial en el ámbito de las economías con bajas emisiones de carbono. Sus miembros reconocen las oportunidades y sinergias entre todos los países que representan, y están orientados a la protección y la conservación del clima”, afirma Nicole Figueredo de Oliveira, directora de 350.org Brasil y América Latina Para Nicole, “si la sociedad y los gobiernos no se movilizan para contener la entrada y el avance del fracking en sus respectivos países, no solo las comunidades locales sufrirán los impactos del cambio climático, también el resto del mundo”.
El primer encuentro realizado el 19 de septiembre en Montevideo, Uruguay, reunió a representantes del Parlamento Latinoamericano y fue parte de la programación paralela de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat), sirviendo para intercambiar experiencias en el combate contra el fracking y dando como resultado la formación de un frente amplio para la construcción de estrategias conjuntas. En esta segunda edición, decenas de parlamentarios nacionales y de las provincias ya han confirmado su presencia, además de representantes del movimiento medioambiental y activistas contra la tecnología, demostrando la importancia y la urgencia de contener el avance de la industria de los hidrocarburos.
“Considerando que la economía de estos países se basa en la agricultura, es fundamental asegurar que la industria agrícola latinoamericana esté libre de contaminación. Siendo así, la prohibición del fracking en el continente no solo protegerá la salud de las personas, animales y el medio ambiente, también garantizará la competitividad de los productos en el mercado internacional, en un momento en el que los países ya están creando restricciones a las importaciones de los alimentos provenientes de áreas de exploración del gas de esquisto”, defendió Juliano Bueno de Araújo, coordinador de Campañas Climáticas de 350.org y fundador de COESUS.