Los investigadores descubrieron dos nuevas especies de gato dientes de sable en Langebaanweg, Sudáfrica, y los hallazgos de composición fósil muestran una posible ruta migratoria.
Un equipo colaborativo de investigadores detalló sus hallazgos de dos nuevas especies de dientes de sable, Lokotunjailurus chinsamyae y Dinofelis werdelini. Los fósiles fueron desenterrados del sitio del Plioceno temprano, ‘E’ Quarry, Langebaanweg, Sudáfrica. Los resultados de la investigación se publicaron en iScience.
Mientras que las especies fósiles del género Dinofelis de gatos dientes de sable se han registrado en todo el mundo, en Norteamérica, China, Europa y África, las del género Lokotunjailurus sólo se habían identificado en Chad y Kenia antes de este estudio.
Gran evento climático
La época del Mioceno-Plioceno duró desde hace aproximadamente 23 a 2,6 millones de años. Fue parte del período Neógeno, en sí mismo anidado dentro de la era Cenozoica, un tiempo caracterizado por el predominio de plantas con flores, aves, un clima seco y fresco, mamíferos y coníferas.
El Plioceno se caracterizó por la persistencia del frío y el crecimiento de las capas de hielo en el hemisferio norte, mientras que en el Mioceno aumentó la variedad de mamíferos y se desarrollaron las praderas.
Hace unos 5,3 millones de años, durante el cambio entre estas épocas, se produjo un importante acontecimiento climático. Los primeros homínidos aparecieron por primera vez en el registro fósil durante esta época, mientras que diversos animales y plantas experimentaron cambios evolutivos. El terreno, la temperatura y la evolución biológica de la Tierra se vieron muy influidos por la época Mioceno-Plioceno.
Antecedentes de la evolución humana
El autor principal del estudio y paleontólogo de la Universidad Complutense, Alberto Valenciano, (junto con investigadores colaboradores provenientes de España , China y Sudáfrica) utilizó materiales fósiles alojados en el Museo Isiko para desarrollar el proyecto. El equipo evaluó los aspectos físicos de los fósiles de dientes de sable: ausencia/presencia de dientes, estructura dental, forma del cráneo y mandíbula.
El equipo codificó los datos que recopilaron, entretejiéndolos en una matriz con la que construir un árbol filogenético que indique la relación de las especies de dientes de sable. La composición resultante de las especies de dientes de sable de Langebaanweg sugiere que el entorno que habitaban hace unos 5,2 millones de años estaba compuesto por pastizales y áreas de bosque.
Los investigadores comentaron: «La continua aridificación a lo largo del Mio-Plioceno, con la propagación de ambientes abiertos, podría ser un importante desencadenante del bipedalismo de los homínidos.» Los investigadores añadieron: «El grupo de dientes de sable de Langebaanweg y sus implicancias ambientales y paleobiogeográficas proporcionan antecedentes para futuros debates sobre el origen y la evolución de los homínidos.»
La apertura de las praderas en el Mioplioceno no sólo favoreció la caza de grandes grupos de animales de presa que se alimentaban de hierba por parte de depredadores como el dientes de sable, sino también de los primeros humanos. Los cambios en los hábitos alimentarios, como el consumo de carne, la caza en las llanuras abiertas, la fabricación y utilización de herramientas, y la formación de grupos sociales complejos para protegerse de los peligros y ejecutar con éxito las cacerías, son cambios sociales y culturales fundamentales que influyeron en el curso diferenciado de la evolución de los homínidos y culminaron finalmente en la aparición de los humanos modernos.
Seguir investigando
Los investigadores expresan que la composición de los fósiles de dientes de sable identificados en el yacimiento de Langebaanweg es similar a la hallada en Yuanmou (China). Esto sugiere que el entorno podría haber sido similar y/o apunta a una posible ruta de migración. Es necesario seguir investigando para descubrir la profundidad de la relación entre los yacimientos de Langebaanweg y Yuanmou.
Fuente: Stephanie Leonida Meteored Reino Unido