Los últimos registros confirmados de grupos familiares de nutria gigante en Argentina son de la década de 1980.
Investigadores ambientales avistaron en El Impenetrable un ejemplar de nutria gigante o lobo gargantilla, una especie que se creía extinta en Argentina.
La nutria gigante o lobo gargantilla se pudo ver el domingo en aguas del río Bermejo y fue captada por integrantes de la Estación de Campo El Teuco, perteneciente a la fundación Rewilding Argentina que trabaja en la conservación del Parque Nacional El Impenetrable, en la provincia de Chaco.
“Los últimos registros confirmados de grupos familiares de nutria gigante en Argentina son de la década de 1980. A partir de ahí solo se conocen algunos registros poco precisos de ejemplares solitarios. En el río Bermejo la extinción se verificó mucho antes, al menos hace 100 años atrás. O eso creíamos”, comunicaron desde la página de Facebook de la fundación.
En el relato que hacen sobre el avistamiento, desde la fundación contaron que sucedió el domingo en un «alto de las tareas en la Estación de Campo El Teuco», por parte del director de Conservación, Sebastián Di Martino, quien salió a a andar en kayak por el río Bermejo.
Di Martino «escuchó un chapoteo en el agua» y creyó ver un lobito de río. Alertado por un grito del animal, se detuvo a observarlo por un grito. «Recordaba mucho a los sonidos que profieren Coco y Alondra en su corral de presuelta de Iberá. Ya con el celular en mano comenzó a filmarlo y cuando este animal se irguió en el agua y mostró su pechera blanca no quedaban dudas. Se trataba de un ejemplar de nutria gigante”, describen en la publicación sobre el descubrimiento.
“El Impenetrable sigue dándonos sorpresas”
Por otra parte, la fundación recordó que gran parte de sus integrantes se dedican “a intentar revertir la crisis de extinción de especies que asola a nuestro planeta”. Por eso destacaron: «El Impenetrable sigue dándonos sorpresas, mostrándonos que la naturaleza es resiliente y que, si la ayudamos un poco, puede recuperarse”.
También remarcaron la necesidad de proteger la zona de cazadores furtivos. “Toca ahora enfriar la cabeza y pensar acciones de conservación para proteger a este ejemplar y a otros que pudiera haber por la zona. Urge patrullar el río Bermejo”, manifestaron.
Cabe destacar, además, que la fundación en su cuenta de Twitter comunicó recientemente la llegada al pais de «Nanay», un macho de nustria gigante, con el objetivo de «formar una segunda pareja reproductiva para el proyecto y de a poco ir recuperando la especie en Iberá».