Una mujer de Coronel Suarez, retiró todos los recuerdos y elementos que la gente fue dejando con el paso del tiempo en la cruz que se instaló en la cumbre del Cerro Ceferino. En su cuenta de Face dejó en claro que su «Misión» fué limpiar el lugar, lo que generó el repudio de mucha gente de comunidad y lo expresaron en una nota de opinión con el título: “La cultura es la idiosincrasia del pueblo no se debería intervenir”.
Así, el pedido expresa:
“En la Argentina, como en tantos otros países del mundo, existen santuarios donde la gente deposita efectos personales, sean por promesas, deseos o agradecimientos y el común de la población los respeta como tal. Por ejemplo, son muy conocidos los santuarios del Gauchito Gil, de la Difunta Correa o la Virgen del Milagro en Salta.
En nuestro querido pueblo de Sierra de la Ventana y Villa La Arcadia nos encontramos con el Cerro Ceferino o Cerrito del Amor, donde también tenemos ese espacio para pedirle al Señor por nuestros seres queridos.
Cada persona que desea dejar un efecto personal simbolizando un recuerdo, un deseo y hasta envoltorios con cenizas de sus seres fallecidos, lo hace en la cumbre del mismo al lado de una cruz o colocado en la misma.
Visualmente no condice con el hermoso paisaje que rodean los cerros, pero sobre la cultura e idiosincrasia del pueblo no se debería intervenir.
No se entiende el por qué esas cuestiones centenarias deben terminarse y ser eliminadas, ya que en ese accionar se atenta contra la memoria, los sueños y las creencias de mucha gente.
No se debería tratar cada uno de esas ofrendas, que no son más sentimientos, como si fuesen material de descarte.
Hay que ser muy cuidadosos y respetuosos con estos temas. Respeto y cuidado que no se tuvo. Una pena”.