El plan de seguridad que el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, le presentó al presidente de la Nación, Alberto Fernández, incluye sumar policías, adquirir nuevo equipamiento y redistribuir el personal para combatir el delito en el territorio bonaerense.
Fuentes del Poder Ejecutivo provincial precisaron hoy a Télam que se trabaja en la elaboración de un programa de reclutamiento de 10 mil nuevos policías, en la construcción de módulos carcelarios y en la adquisición de patrulleros y equipos de telecomunicaciones.
También, de acuerdo a los voceros, se busca «redistribuir mejor el personal para optimizar la cobertura en los barrios» con mayores niveles de delincuencia.
Además, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, trabaja junto a los intendentes en la elaboración del programa «Más trabajo, menos reincidencia».
Según precisaron desde el Gobierno de Kicillof, en la actualidad, el 55% de las personas privadas de la libertad atraviesan al menos su segunda detención, por lo que el objetivo es lograr «una fuerte reducción de esa tasa».
El plan contempla programas de trabajo articulados entre los ministerios de Desarrollo nacional y provincial, así como la identificación de las necesidades productivas y laborales de cada territorio para poder desarrollar la capacitación laboral en esas áreas.
«La idea es que a través de los municipios se puedan ofrecer opciones laborales al concluir la condena», detallaron en la provincia.
Asimismo, manifestaron que se impulsará un fortalecimiento de las cooperativas y organizaciones sociales que ya se dedican a la contención de los presos.
