Vecinos que residen en el sector de calle 17 y 39, indicaron que hay una persona asustando a los chicos de la barriada y llamaron en dos ocasiones a la policía.
Hace 18 años atrás pasó algo similar con una persona que se hacía pasar por la «Llorona» y que tuvo en vilo a vecinos de un barrio cercano.
En la tarde-noche del martes una persona de contextura mediana, supuestamente del sexo masculino, vestida enteramente de negro, usando una máscara y llevando cadenas entre sus manos, estuvo asustando a niños que viven en el barrio de calle 17 y 39 de esa ciudad. Al ser alertados los padres, intentaron buscarlo y dar con él, pero solamente escuchaban el ruido de las cadenas entre los altos pastizales que hay en el sector, que sumado a la escasa iluminación, no hizo posible dar con el mismo. Llamaron a la policía pero tampoco lo encontraron y una vecina en horas de la madrugada aseguró que le quisieron abrir primeramente una puerta y después una ventana de su vivienda, lo que obligó a llamar nuevamente a los efectivos policiales, quienes no divisaron a nadie en los alrededores.
“Multimedio-Pringles” dialogó con una de estas vecinas, en este caso Yamal Valenzuela, quien explicó: “El martes a la noche alrededor de las 19:30 y 20 hs andaba una persona con una máscara, ropa oscura y una cadena colgando de sus manos asustando a las criaturas. Mi nene me dijo que el perro toreaba y cuando salí lo veo y le pregunto qué hacía, que diera la cara y no quería hacerlo. Estaba con mis nenes y dos nenitas vecinas, así que llamé a los papas de las nenas y vinieron y con uno de los señores fuimos para dar con esta persona, pero no lo veíamos y le gritábamos que saliera, pero no contestaba y hacia ruido con las cadenas. Después vino la policía y lo buscó y no lo encontró. Alrededor de las 1 de la mañana me quisieron abrir primero la puerta y después la ventana y no pudieron y llamé de nuevo a la policía y vinieron nuevamente y no vieron a nadie. Me dijeron que había quedado un patrullero sobre calle 17, pero no pueden dar con este sujeto. Yo lo que quiero es que hagan algo y que se tomen medidas, que ande más seguido el patrullero, encima los alrededores están llenos de tamariscos y pastizales, así que se puede esconder fácilmente donde quiera. Somos varios vecinos y es la primera vez que pasa ésto. En mi casa estaba muy asustada y tuve que llamar a mi hermana para que viniera a hacerme compañía, pero no puedo estar llamándola todas las noches. Tampoco hay muchas luces, hay una sola y no se ve nada por la noche”, aseguró la vecina.
Hace unos 18 años atrás en un sector cercano a este barrio también había sucedido algo similar con una persona que asustaba a los vecinos haciéndose pasar por la llorona, que tuvo en vilo a la barriada por unos cuantos días hasta que lograron dar con la misma.