LLegaron de Leiria, Portugal, el 8 de marzo a Olavarría para participar de una fiesta familiar. Desde entonces se encuentran sin poder volver a su país, sus trabajos estarían en riesgo, sus familias muy distantes y las autoridades de su país no les dan ninguna posibilidad de volver momentáneamente.
Buscan casi desesperadamente juntarse con otras personas en condiciones similares para poder lograr el regreso a su lugar de origen; en el día de la celebración de la Virgen de Ntra Sra. de Fátima, tres testimonios muy interesantes.
Desde el momento de la explosión de la pandemia se encuentran viviendo en la casa de Claudio Manzano, uno de sus familiares que los cobijan y contienen.
Se trata de 2 argentinos (Augusto Valente y Emiliano Valente) y 1 portuguesa (Inés Soreira) que vinieron al país desde Leiria a festejar una ocasión especial el 8 de Marzo y siguen al día de hoy varados en Olavarría. Están permanentemente esperando respuestas de parte de Cancillería y Viajes Humanitarios, quienes prometen resolver su situación, pero cuando se acerca la fecha de partir, no hay vuelos o se completan con gente de otras nacionalidades.
Claudio Manzano y su familia son quienes los están hospedando desde el día 1 y con quien charlamos en esta entrevista acerca de la situación de los varados. Claudio sostiene que, a pesar de la situación de sus familiares, él, su mujer y sus hijos se sienten contentos de poder compartir tiempo con ellos y de vivir la cuarentena juntos «esto es familia» expresó. El problema es que, obviamente, los 3 tienen una necesidad enorme de volver a su tierra porque sufren el riesgo de perder sus puestos de trabajo y/o que sus salarios caigan.
Claudio nos comenta en la nota que, a través de los medios locales, están tratando de buscar más personas bajo las mismas condiciones para ser más escuchados. La realidad es que, para ellos, todo se está tornando muy engorroso y difícil ya que se les complica para comunicarse con sus familias y con la embajada. Por ahora, se manejan con wifi debido a que al estar sus líneas de teléfono conectadas a su país, los costos de una llamada para ellos aquí son muy caros. Claudio aclara que obtienen respuestas de las autoridades, a veces inmediatas y otras veces retrasadas. Les prometen soluciones pero al momento de viajar, siempre les cancelan los vuelos, «las desilusiones que se llevan son muy grandes» afirmó tristemente.
A la mitad de la nota, pudimos conversar con Emiliano quien nos interiorizó un poco más en su situación. Nos contó que él y su esposa (Inés) viajaron a Argentina con la intención de quedarse unos 15 días en Olavarría y que su papá (Augusto) iba a quedarse unos días más hasta Abril. Desde entonces, les han cancelado vuelos desde distintas aerolíneas. Una de las respuestas que recibieron fue que no iban a poder viajar hasta el 1 de Septiembre, pero Emiliano sostiene que es imposible esperar hasta cierta fecha porque sus trabajos corren riesgo, «yo trabajo en una fábrica de moldes de sistema de inyección y mi esposa en otra fábrica. Nos están manteniendo los puestos de trabajo gracias a que es una empresa seria que entiende la situación, pero no sabemos hasta cuándo nos van a aguantar. Hace 2 meses que estamos sin cobrar » comentó Emiliano preocupadamente. Además, nos explicó que cuando hicieron su viaje hasta nuestro país, sólo había 2 casos de COVID-19 en Portugal y que tampoco se hablaba mucho del tema, por lo que no creyeron les iba a impedir algún tipo de tránsito. Hoy en día, la zona donde ellos residen, Leiria, está afectada con alrededor de 70 casos del virus, «gracias a Dios no les tocó a mi familia ni a mis compañeros» dijo. «Lo positivo de todo esto debe ser que el hombre aprenda, el planeta también necesita estar mejor, se nota cómo la polución bajó. Creo que no vendría nada mal que, por año, haya una cuarentena de 15 días para que el medioambiente vuelva a respirar» respondió graciosamente cuando le preguntamos cuál era su visión sobre toda esta situación mundial.
Luego, charlamos con Inés, la esposa de Emiliano, nativa de Portugal. «Nunca estuve tanto tiempo fuera de casa, por momentos se vuelve muy difícil, extraño mucho a mis padres» se expresó Inés al contar su experiencia.
Y finalmente, pudimos conversar con Augusto Valente, hermano del suegro de Claudio Manzano, quien se encuentra en la misma circunstancia que su hijo y su nuera. «No sé la cantidad, pero sé que hay mucha gente en el país igual a nosotros» afirmó. Cuando le preguntamos sobre las respuestas que estaban recibiendo de parte de la Embajada Portuguesa respondió firmemente «información, poca. Concreto, nada». Augusto quiso destacar su agradecimiento con toda la familia Manzano, quienes los apoyan y contienen en esta difícil realidad.
Si sabes de alguien que está pasando por una situación similar a la de Augusto, Emiliano e Inés, que quieren volver a Europa, sería de gran ayuda que te comuniques con ellos a través del teléfono 2284431685 (Teléfono fijo de Claudio Manzano – Olavarría).