Malcom Jesús Rodríguez dejó de comunicarse con su familia el pasado 8 de julio. Nadie sabe de él. Desesperada búsqueda de sus familiares.
La pequeña localidad pampeana de Anguil vive días de mucha convulsión. Es que uno de sus pobladores, Malcom Jesús Rodríguez, se encuentra desaparecido hace dos semanas, y la angustia se acrecienta a medida que pasan las horas.
El joven que viajaba como mochilero se contactó por última vez con su mamá el pasado 8 de julio, cuando estaba camino a Pigüé. A partir de allí se cortó la comunicación. Su madre, preocupada, radicó la denuncia.
Su hijo debía avisarle una vez que pusiera un pié en esa ciudad bonaerense, pero el llamado nunca llegó. Es más, cuando ella trató de contactarlo del otro lado una grabación le indicó que ese número en cuestión estaba fuera de servicio.
Según la información que brindó a la policía, Malcom es de contextura delgada, tez trigueña, ojos marrones, pelo color negro, barba, mide 1.70 metros y posee un pequeño tatuaje en la espalda de un dragón.
Llevaba puesta ropa toda negra y borceguíes marrones, una mochila azul y negra con sus prendas de vestir, una bolsa de dormir verde y una carpa color naranja.