Gabriel Allende, concesionario de Namaste, contó los destrozos que un grupo de vándalos le genero a su predio en la noche del miércoles. “Claramente son chicos que no tienen otra cosa que hacer más que daño”.
Grande fue la sorpresa de Gabriel Allende, concesionario del balneario Namaste, cuando descubrió esta mañana que un grupo de ineptos había generado varios destrozos en su predio.
Al respecto explicó que “estuvimos trabajando junto con el municipio luego de la temporada y anoche en un acto de vandalismo nos rompieron todos los bancos, una piedra parada y un fogón. No entendemos el motivo. También rompieron carteles. Claramente son chicos que no tienen otra cosa que hacer más que daño”.
Reflexionando, Allende dijo que “uno trata de ponerle toda la energía para que el lugar esté bello, para que los turistas lo disfruten… vamos a trabajar a contra reloj para que los turistas lo puedan disfrutar igual, pero esto atenta contra el turismo”.
Recapitulando lo sucedido durante el verano, afirmó que “en la temporada nos robaron 20 palitas para el fogón. Uno se las presta de onda al turista y se las llevaban. Tenemos un banco de madera que es muy pesado. Como tragicómico decimos que es random porque dependiendo el día aparece en distintos lugares”.
Entre los puntos positivos que tuvo la temporada destacó que “sacamos los tachos y la gente comenzó a llevarse su basura. Bajamos considerablemente la cantidad de desperdicios que juntábamos por día. Lo mismo la contaminación sonora, preferimos dejar el sonido de la naturaleza en vez de música”.
Por último, y volviendo sobre las pérdidas que tuvieron, mencionó que “habíamos pintado los bancos, pusimos una luz solar para que la gente pueda tomar mate, pusimos una réplica de una piedra parada, como adorno, y en total rompieron 6 bancos, tiraron la piedra parada y desplazaron un fogón. Para desplazar el fogón debieron usar un vehículo. Claramente se querían llevar la parrilla”.