El virus del síndrome respiratorio del Medio Oriente, conocido como «Virus del Camello», que afecta al menos a tres jugadores de la Selección de Francia que enfrentará a la Argentina en la final de la Copa del Mundo de Qatar 2022, «puede dar cuadros de neumonía graves o gripe, tiene menor contagiosidad que la Covid-19 pero se transmite igual por vía área, por lo que las medidas de prevención son las mismas, según remarcó un infectólogo.
(Télam) – «El virus referido a los contagios de los jugadores franceses, asociado a los camellos, seguramente es el que provoca el MERS (por sus siglas en inglés), un coronavirus que generó distintos brotes en las dos últimas décadas en el Medio Oriente, principalmente por el reservorio que tienen los camellos y se demostró que tiene menor poder de contagiosidad a la fecha, respecto a lo que sabemos del SARS-CoV-2, que provoca el coronavirus», informó hoy a Télam el jefe del servicio de infectología del Hospital Cuenca Alta, de Cañuelas, Javier Farina.
El delantero Kingsley Coman se contagió en las últimas horas del denominado «Virus del Camello», una especie de gripe que también afectó al defensor Dayot Upamecano y el mediocampista Adrien Rabiot, y encendió preocupación en la selección de Francia a tres días de la final de la Copa del Mundo ante la Argentina.
El entrenador de Francia, Didier Deschamps, reveló al periódico deportivo español AS, que Coman «tuvo fiebre por la mañana» y debió permanecer aislado en el hotel, además de estar procurando tener «todos los cuidados posibles para que el virus no se propague al resto del plantel».
Consultado sobre el virus, Farina -también miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI)- explicó que «puede dar un cuadro de neumonías graves o un cuadro respiratorio banal, como una gripe, pero tiene mayor letalidad que el SARS COV2, principalmente porque la afección es mucho más grande a nivel pulmonar que a las vías aéreas superiores del coronavirus».
Según informa en su sitio web la Organización Mundial de la Salud (OMS), un alto índice de pacientes, cerca del 35% de los casos de personas con MERS notificados a ese organismo, fallecieron.
Farina señaló que el MERS y el SARS, denominado SARS CoV1 para distinguirlo del SARS CoV2, detectado por primera vez en Arabia Saudita en 2012, «son dos coronavirus que generaron brotes en varios Estados Miembros de Oriente Medio, África y Asia Meridional, aunque fueron contenidos y no tuvieron diseminación mundial hasta la fecha».
Según la OMS, la transmisión de persona a persona del virus MERS «es posible y tuvo lugar predominantemente entre contactos directos y en entornos de atención de la salud».
«Los mayores brotes se produjeron en establecimientos de salud de Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y Corea del Sur. Fuera de los entornos de atención de salud, no se documentó una transmisión sostenida de persona a persona en ningún lugar del mundo», detalló el organismo internacional.
En tanto, Fariña indicó que como es un virus que se contagia por el aire, al igual que el SARS CoV2, «las medidas de prevención son las mismas, como el uso de barbijo, distanciamiento social y los lugares de mala ventilación y amontonamiento de personas son los más propicios para el contagio».
Se prevé que la permanente exposición al aire acondicionado y el cambio de temperaturas que se producen en los ambientes en Qatar, además del cambio de clima de los últimos días, provocaron contagios de esta variante de gripe, que presenta síntomas tales como fiebre, tos, diarrea y vómitos.
Asimismo, el médico infectólogo recordó que para este virus «no hay tratamiento ni vacuna puntualmente efectivo hasta la fecha».